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POEMAS DE JAIME NÚÑEZ

 

 

ELECCIONES

 

A Zapata

y Sebastián

 

Mediodía

los chacales andan sueltos

mostrando los colores

de hambre, marginación

y sangre…

Amparado por tu ejemplo

hermano, trato de no cansarme.

Otra vez,  es mediodía,

cine central; domingo

espero a Lolo gesticulando

buscando la forma de arreglarme

estas greñas que no creen

en mariposas preñadas

o en elefantes y hormiguitas

fornicando.

Esperando el momento

de la llamarada

la hora exacta

la hora de los elegidos…

 

ESPÉRAME

 

Si regresara a la Facultad

te diría cosas profundas

por ejemplo, que te amo.

Sí, te amo con este

amor combatiente

con este amor a la patria

si regresara

te entregaría estos

versos

sazonados con hojitas

de venga, venga

con raíces

de no me dejes…

 

POEMA EN LA PARED

 

A Mercedes

 

Es media vida

y relleno tu piel de locuras.

Bajo tus lunas me propongo

abrir nuevos senderos,

calentar el amor

y prolongar mis años niños.

Es el ombligo de la vida

y repartes en mis manos la poesía.

Asoman ahora las canas a mis sueños.

Siempre solidaria con esta mi vocación

de ayunos y desvelos.

Y a pesar el verano

me alivianas de lluvia

me provees de frescuras

entre tus piernas hay olor

a patria nueva…

 

AGUA DE TILO CALIENTITA

 

La noche llegó violenta

espueleada por demonios

ambulantes.

Te presentí partir amparada

por un paraguas dogmático.

El amor no es un mancebo

doméstico niña;

es más bien un viejo rebelde

apedreándose el narcicismo.

Pero cómo podría

darme tus labios, aunque sea

a boca de paisaje…

Si solamente

eres una sombra

que he inventado

para sobrevivir

a las horas difíciles…

 

ÚLTIMO DESEO

 

Cuando muera incineras

junto a mis despojos

el poema olvidado,

la antítesis inédita.

Cuando regrese a la madre tierra

tal vez mi único desconsuelo

sería

no apreciar mi nombre en una pinta.

Cuando encuentre la paz que no merezco

me marcas el tatuaje

que siempre quise,

cuentas a mis hijos de fotografía

que fui bueno, solidario y consecuente;

desde luego consuelas a mi madre

desposas a mis hijas

coscorroneas al hipócrita en mi nombre

te bebes mi café neurótico

riegas el huerto de doncellas académicas

concluye el libro de mis ansias,

dedícame una ranchera

no me dejes partir así

tan impuro,

eleva una plegaria por mis desvíos…

pide a tu Dios que me ignore

como hasta ahora,

que vea tu fe y no mis pecados…

 

 

 

 

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