Página de inicio » Opiniones » Porqué ARENA y FMLN no serán cancelados

Porqué ARENA y FMLN no serán cancelados

Por Leonel Herrera*

El régimen bukeliano ha lanzado una nueva “cortina de humo”: la posible cancelación de ARENA y FMLN. Quiere que la oposición y la ciudadanía crítica hablen sobre la eventual desinscripción de los partidos de oposición, mientras suceden quién sabe qué cosas que no quiere que la gente sepa.

Y para ello echa mano del tristemente célebre colectivo de “intelectuales del siglo xxi”. Los propagandistas de la dictadura dicen que solicitarán al Tribunal Supremo Electoral (que mejor debería llamarse “tribunal sumiso electoral”) la cancelación de los partidos históricos de la derecha y la izquierda porque “pactaron con las pandillas” en las elecciones de 2014.

La iniciativa surge luego que un tribunal de sentencia condenó, entre otros, al ex ministro efemelenista Benito Lara y al ex edil arenero Ernesto Muyshondt por negociar con pandillas. Por cierto, la resolución todavía no es firme porque hay instancias procesales que agotar y la defensa de ambos ex funcionarios anunció que apelará la resolución condenatoria.

La payasada de estos “intelectuales” consiste en anunciar algo que difícilmente sucederá. Por tanto, en este texto planteo tres razones por las cuales la dictadura no podría desinscribir a ARENA y al Frente. Son tres motivos por los que el régimen depende de la existencia de dichos partidos.

La primera es que la desinscripción de ARENA y del FMLN por “negociar con pandillas” sentaría un precedente legal por el que después podría ser proscrito Nuevas Ideas (NI). Los “intelectuales del siglo xxi” pasan por alto que el actual partido de gobierno pactó con las maras para las elecciones municipales de 2015, las presidenciales de 2019 y las legislativas de 2021.

Los mocionantes de la cancelación de “ARENA/Frente” no tienen en cuenta que, cuando también sean condenados por pactar con las maras funcionarios de este gobierno, inevitablemente NI también será cancelado. Quizás eso les parece lejano debido al control gubernamental del sistema judicial del país, pero deberían recordar que Osiris Luna y Carlos Marroquín ya están procesados en una corte de Nueva York.

Los “intelectuales” se hacen del ojo pacho ante las múltiples evidencias de que sus patronos también negociaron con pandillas, no sólo ARENA y el FMLN. El Faro ha documentado con videos, documentos, audios y más pruebas de que los pactos con las maras fueron fundamentales para que Nayib Bukele ganara la Alcaldía de San Salvador, la Presidencia de la República y la súper mayoría legislativa que le permitió tomar el control de todo el Estado en mayo de 2021.

La segunda razón tiene que ver con que la existencia de ambos partidos de oposición es necesaria para la eficacia de la narrativa oficialista. Si “ARENA/Frente” ya no están, el régimen ya no los tendría como “chivos expiatorios” y elementos de distracción: no los podría acusar de todos los males y se caería la estrategia de  amenazar con su regreso al poder.

Sin estos partidos, el relato de la dictadura no funcionaría. La existencia de ARENA y el FMLN es indispensable para mantener vivo el peligro de “volver al pasado” y lo que eso significa según la propaganda oficial: regreso de las pandillas, corrupción y demás fechorías que cometieron los “mismos de siempre”. Por eso ambos partidos no podrían ser cancelados.

Y la tercera razón está relacionada con el objetivo de impedir el surgimiento de nuevos instrumentos políticos que amenacen la hegemonía bukelista. En gran medida, la existencia de ARENA y del FMLN representan un obstáculo para que aparezcan nuevos sujetos partidarios con posibilidades de disputar el poder a la dictadura. Y eso le conviene a los jefes de los “intelectuales del siglo xxi”.

La cancelación de ARENA y del FMLN automáticamente habilitaría a nuevos actores políticos, en la derecha y en la izquierda. Por eso el régimen necesita mantenerlos, y mantenerlos tal como están: pequeños, desfinanciados, desprestigiados, desvinculados de la agenda ciudadana y sin posibilidad de capitalizar los descontentos sociales crecientes.

Así que los partidos de oposición difícilmente serán cancelados porque el efecto de su desaparición podría  derivar en un precedente legal aplicable también a Nuevas Ideas, en el debilitamiento de la estrategia propagandística oficial y el surgimiento de nuevos competidores políticos a los que el bukelismo no podría descalificar tan fácilmente como lo hace ahora con “ARENA/Frente”.

*Periodista y activista social.

Ver también

Elección de un alcalde comunista en Nueva York

Compartir        César Ramírez @caralvasalvador (CNN Chile 04.11.2025/11.50) “Si el candidato comunista Zohran Mandani gana las elecciones …