Bitcoin delenda est

 

Caralvá

Intimissimun

Paráfrasis de Catón el Viejo con su frase Carthago delenda est (Cartago debe ser destruida).

Hemos observado la montaña rusa del Bitcoin bajo la óptica de los millones de dólares que nuestra nación ha invertido con dinero público, es la voluntad de una sola persona, no es para menos la pérdida de capital en representación de valor con tanto dinero en juego, es un binomio de luz y sombra, calor y frío, vida o muerte, como Eros y Tánatos, Deinos y Fobos o el refrán: La dicha y el pesar siempre marchan a la par.

Un signo de los tiempos es la información internacional sobre ese criptoactivo[1]:

11JUN022 bajo $25,600.26 alto $28,296.76;

12JUN022 bajo $23,431.23 alto $28,277.20;

13JUN022 bajo $22,611.06 alto $28,277;

14JUN022 bajo $20,834 alto $23,761;

15JUN022 bajo $20,087 alto $22,705;

16JUN022 bajo $20,250 alto $22,950;

17JUN022 bajo $17,786 alto ?

18JUN022 bajo $18,739 alto $21,183;

18-19JUN022 bajo $17,934 alto $20,783;

Mientras el precio máximo del Bitcoin fue el día 09NOV021 $67,549[2].

 

Los números son simples representaciones abstractas pero cuando son dólares, significan ramas de olivos o armas de destrucción masiva, porque los dólares se convierten en alimentos, medicinas, escuelas, salarios o por el contrario su ausencia es corrupción, hambre, miseria, emigración o destrucción de valores sociales de la democracia; los dólares de nuestra nación son del presupuesto nacional, es dinero del pueblo, pero acá no existe control administrativo sobre dicha gestión, ni rendición de cuentas, ni información en la toma de decisiones, nada… es similar a un “decreto de olvido”.

 

Vivimos una situación extraña en El Salvador, no parece República, no parece el Siglo XXI, no tenemos derecho de asociación, reunión, nuestra realidad es un Estado de Excepción, somos la víctima de ideas extraviadas y conocemos al victimario… somos niños que enfrentan la muerte en el desierto de Sonora (en la frontera de México y Estados Unidos) estamos solos.

 

Bitcoin delenda est… es la divisa en la bandera contra la fatalidad, sin opción privilegiada ni sueños imposibles, no debemos continuar con la apariencia de nación millonaria que compra (Buy The Dip) y compra y sigue comprando, con el sueño que su dinero de la noche a la mañana se triplicará, como las monedas de oro que entierra Pinocho para su árbol mágico en el campo de los milagros:

“como Pinocho vuelve a casa para darle las monedas a su padre, se encuentra con un zorro y un gato en el lado de la carretera. Ellos le dicen que, si él planta sus monedas en el Campo de los Milagros en las afuera de la ciudad de Catchfool, entonces se convertirá en un árbol con mil monedas de oro”[3]

Ya sabemos en que termina y en qué terminaremos…

amazon.com/author/csarcaralv

 

 

 

 

 

 

 

[1] Coindesk

[2] yahoo!Finanzas

[3] https://onceuponatime. Fandom.com

Ver también

«Orquídea». Fotografía de Gabriel Quintanilla. Suplemento Cultural TresMil, 20 abril 2024.