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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
La Asociación Comunal Héroes 11 de Abril, del municipio de Arcatao, Chalatenango, denunció una serie de atropellos a los derechos humanos de la población del lugar cometidos por miembros de la Fuerza Armada (FAES), designado como “Destacamento Sumpul”, que pertenece a la 4ta Brigada de Infantería, ubicado en el desvío El Paraíso.
Fue en un tweet que el presidente Nayib Bukele ordenó al ministro de Defensa, en octubre de 2020, militarizar los límites fronterizos entre El Salvador y Honduras, específicamente en los municipios de Arcatao, Nueva Trinidad, San Ignacio y San Fernando. Además, de acusar a las autoridades locales de tener vínculos con el narcotráfico, en el marco de las elecciones del 2021.
Los pobladores solicitan el cese del acoso que son víctimas los pobladores de las zonas fronterizas, además de repudiar este tipo de medidas que lejos de controlar el supuesto tráfico de drogas, atenta contra la sociedad civil organizada.
“El acoso a los pobladores de las zonas fronterizas como, El Portillo, Pepeto, Chavarrías y otros, es contra familias que sobreviven de la agricultura, y su lugar más próximo para comercializar sus productos, es el casco urbano de Arcatao. Y todos estos son ciudadanos salvadoreños, aunque vivan en territorio de Honduras, por la delimitación debido al fallo de la Corte Internacional de La Haya”, dice la Asociación.
Asimismo, denunció que el decomiso de sus productos agrícolas o el dinero de sus ventas continúo, principalmente de granos básicos, que es el principal sustento o ingreso económico para la sobrevivencia de las familias de la zona, luego de vender en plaza frijol y maíz y comprar sus canastas básica que cubren sus necesidades principales, pero con esos maltratos están agravando la vida de niñas, niños, jóvenes y adultos mayores, señala. “Recientemente, fue privado de libertad y decomisado los productos, a un poblador que se conducía en su vehículo al municipio de Arcatao. El ciudadano se dedica al comercio de granos básicos, y que en esa ocasión venía de la comunidad El Portillo, de comprar maíz y frijol a una familia de escasos recursos que necesitaban vender parte de la cosecha para cubrir otras necesidades del hogar. Y es injusto, porque el Caserío El Portillo en la división política administrativa del municipio de Arcatao, y pertenece a El Salvador”, argumentó la Asociación.
Asimismo, señaló que estas acciones de confiscación de granos básicos o dinero de la venta de estos, es una acción que se sucede a diario y lo realizan elementos del Destacamento Sumpul, por lo que pidieron un control más efectivo de las autoridades gubernamentales sobre este tipo de abusos arbitrarios de los militares en la zona fronteriza.
“Pedimos, cesen estas acciones que violentan los derechos humanos de los pobladores en las zonas fronterizas de Arcatao, Chalatenango. Y, a la población en general. Además, que todas las estructuras locales nos sigamos organizando para defender nuestros derechos”, recomendó la Asociación.
