Agenda de la poesía

Caralvá
Intimissimun

Aquél 26 de mayo de 2022 aconteció mi encuentro con la poesía esencial de mi amigo André
Cruchaga, aconteció en la cafetería de la Universidad Centroamericana UCA en San Salvador, hora
09:00 a.m. en las gradas del auditórium dedicado a la Memoria del inolvidable Ignacio Ellacuría;
era una mañana gris, lluviosa, mientras André me compartió sus libros: Oficio del descreimiento
prólogo Enrique Ortiz Aguirre; Antípodas del espejo prólogo José Siles; Invención de la espera y
Estación Huidobro prólogo Elena Muñoz de Latorre, documentos que reflejan la dedicación,
esfuerzo y vocación de este poeta perseverante que nos permite visualizar su horizonte en el
verbo universal.
Para hacer justicia de cada texto, necesitaría un volumen de citas y asociaciones sociales, cada una
referida a un verso, en ese orden Enrique Ortiz Aguirre Catedrático de la Universidad Complutense
de Madrid refiere del Oficio del descreimiento: “… todo un lenguaje para habitar los dominios de
la incertidumbre, el territorio respirante del descreimiento, la condición incrédula de la piel que
nos hace tan profundamente humanos” pág 12. Acontece de esa forma un libro magno que
prohíbe fragmentarle en breves citas, quisiera poseer la calidad multiplicadora para entregar uno a
todos los lectores del Parnaso Cuscatleco, pero esa comunión será quizás virtual como el símbolo
del ángel libertario en la plaza de la Iglesia del Rosario.
Antípodas del espejo con prólogo de José Siles: Sostiene Bértolo que “lo peor que le puede pasar
a un escritor (aparte de morir de éxito) es no poder ser comparado fácilmente” (Bértolo, 2000, 72)
pág 12, y agrega en otro párrafo: “Antípodas del Espejo”… se aprecia el potencial sintetizador de la
sinestesia: “Tenía una boca de acero/ Y una bandera mortal dibujada entre los labios/Reía como el
mar que siente carbones en su vientre/Cómo el mar cuando la luna se mira ahogarse/Como el mar
que ha mordido las playas” (Vicente Huidobro 2020/ siles, 2019) pág 13, y concluye Antípodas del
Espejo es una obra que no va a dejar indiferente a nadie y que constituye un original y bello
ejercicio de sublimación de la existencia.
La invención de la espera… es una provocación el título de ese libro, desde mi punto de vista es
una espada que emerge desafiante y otra que acompaña al combate en silencio, la espera no es
solo el acto inmóvil del árbol con la lluvia, puede ser el complejo organizado de las nubes
convertido en huracán después de clandestinos movimientos marinos, la espera puede ser el vigía
de la nave en la madrugada o la condición de búsqueda del conocimiento en la fatigada
investigación; así se esperan buenos tiempos como el árbol que resiste la sequía del cambio
climático. Los pueblos orientales son maestros de esa disciplina, es muy significativo que en cierta
ocasión cuando los ánimos se tensaron entre China y Estados Unidos por el comercio
internacional, los líderes chinos respondieron: “China sabe esperar”… en respuesta a un cambio de
política de aranceles, de igual forma a diferencia de nuestra cultura occidental, en los pueblos
orientales se educa a los niños en “la disciplina de la espera” como el genio que emerge de una
lámpara concediendo deseos.
Estación de Huidobro… prólogo de Elena Muñoz de Latorre, en su contraportada leemos: “Los
poetas no sienten el tiempo porque su ritmo interior es más potente que el ritmo del tiempo.

Pueden pasar horas de horas suspendidos al fondo de sí mismos o agazapados encima de la
eternidad. Un día pude caber entre dos suspiros y una noche entre dos palabras” Vicente
Huidobro, así escribía el notable autor chileno, iniciador del creacionismo.
La escritora Elena Muñoz anota: – fragmento- “La comunicación de imágenes es asombrosamente
inesperada; Cruchaga, de un “epígrafe” del poeta Huidobro, saca nuevos poemas, los suyos son los
que le entrega la imaginación; se comunica con el lenguaje Huidobriano y resultan poemas de
luminosa inmensidad. “En cada hoja tiembla el corazón/El mundo ha cambiado de lugar” Vicente
Huidobro.
“Hoy tiembla el corazón y el tiempo en su vuelo de ceniza/ tiembla la rama de albahaca de los
sueños/ el arrullo de pared indiferente. La lluvia de peces del ajetreo…” André Cruchaga…
Agradezco la bondad del poeta André Cruchaga al participarme de tan extraordinarios poemarios,
hágase su verbo en el inicio de cada alba terrestre, como otro inicio dimensional entre nosotros a
pesar del Estado de Excepción que nos rodea.
Bibliografía
Oficio del descreimiento/André Cruchaga; prólogo Enrique Ortiz Aguirre – San Salvador: Teseo
Ediciones, 2022. 186 p.
Antípodas del espejo/ André Cruchaga prólogo José Siles – San Salvador: Teseo Ediciones, 2021.
182 p.
Invención de la espera /André Cruchaga – San Salvador: Laberinto Editorial, 2021 – 147 p.
Estación de Huidobro/ André Cruchaga – San Salvador: Teseo Ediciones, 2018 – 143 p.

Ver también

«Orquídea». Fotografía de Gabriel Quintanilla. Suplemento Cultural TresMil, 20 abril 2024.