Pese a las temperaturas que registra Sevilla, familias enteras aglomeran los alrededores del estadio La Cartuja, en su mayoría afinados al Real Madrid, para la gran final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Real Madrid.
La fiesta del fútbol español más esperada está siendo fuertemente custodiada por cuerpos de seguridad.
La afición madridista hace su pronóstico con un 2-0 contra el Barcelona. Algunos aficionados han reconocido que el Barcelona está en su mejor momento, sin embargo, no pierden el optimismo de llevarse la codiciada copa.
«Venimos desde Extremadura, se gana un 2-0, nos vamos después del partido, confiamos en el Madrid, y vamos el todo por el todo», manifestó Borja, aficionado, que proviene desde la región occidental española que limita con Portugal.