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Mirna Jiménez
Diario Co Latino
El secretario de Transparencia, health Marcos Rodríguez, ask aclaró anoche que sus declaraciones sobre el fideicomiso FECEPE es lo que indica una auditoría realizada por el Banco Central de Reserva(BCR), y que todo funcionario público está obligado a rendir cuentas cuando se le menciona. Afirmó que nunca ha hecho una acusación a la diputada de ARENA Ana Vilma de Escobar, porque su rol no es ese.
“Yo nunca he acusado a la señora, yo lo que digo es la verdad, hay una auditoría… cuanto más dure este proceso más claras se van a poner las cosas. No estoy amenazando, es bueno que la gente escuche, entienda” dijo Rodríguez. El funcionario añadió que cuando hay documentos de este tipo la Secretaría tiene la obligación de promover la transparencia a través de la rendición de cuentas para los ciudadanos y no involucrarse en procesos judiciales. “La rendición de cuentas es dar explicaciones, resolver demandas de las ciudadanos y ciudadanas. No es la Corte de Cuentas”, detalló durante el programa Ocho en Punto de Canal 33.
Recordó que la actual confrontación con la diputada de Escobar empezó porque en un programa del día 14 de septiembre él mencionó, entre otros casos, auditorías aplicadas al proyecto de Infocentros y el FECEPE, un fideicomiso manejado desde la Vicepresidencia de la República durante el gobierno del presidente Antonio Saca.
Según Rodríguez, este fideicomiso comenzó con una asignación de 3 millones de dólares y creció hasta los $38 millones. De acuerdo con el funcionario, hay aparentes inconsistencias en la asignación de una parte de ese dinero, según la auditoría del BCR, por lo que sugirió a las instancias correspondientes que investigaran.
Rodríguez dijo que el tema FECEPE tiene los ingredientes de un potencial “conflicto de intereses”, luego de la asignación de fondos a personas ligadas por lazos familiares entre quienes aprueban y quienes reciben fondos. El secretario de Transparencia relata que es ella la que entró en conflicto con él en vez de explicarle a los ciudadanos sobre el destino de los fondos. La exvicepresidenta llegó a la plaza Libertad un día después que él había comentado la auditoría, se le acercó luego de una ceremonia del día de la independencia y le reclamó por sus declaraciones en tono prepotente y rodeada de periodistas.
“Me aborda y me dice que tiene finiquitos y me requiere una audiencia, en medio de periodistas… la nota periodística del 15 de septiembre fue eso, la invito a que debatamos a partir de allí, eso se desata en las redes sociales”, narró el funcionario y agregó que fue ella la que dimensionó el tema.
Rodríguez explicó que la diputada debe demostrar que no ha tenido derecho de respuesta de parte de él, porque la difamación solo procede cuando no existe ese espacio, no obstante, esta condición fue ofrecida, se le planteó además un debate público, aseguró el funcionario.
Según el titular de Transparencia, la diputada De Escobar se muestra molesta porque él le ha pedido aclarar las dudas que rodean el caso FECEPE, la preocupación de la exvicepresidenta no es que la gente está siendo mal informada, sino que se siente ofendida y se muestra víctima, en lugar de aclarar las cosas.
“No es un problema de honor, de amor propio, en sustancia es un proceso democrático”, dijo Rodríguez y ejemplificó que a él le han pedido cuentas de su familia y las ha dado porque de eso se trata.
En todo caso, a juicio de Rodríguez, ya que se ha abierto la investigación es bueno que la gente entienda lo sucedido por lo que prefiere no conciliar, ya que si es para aclarar las cosas valdrá la pena la demanda, considera.
“Si yo he estado dispuesto a dar la vida por cambiar el mundo, quizá un poco idílicamente, bien puedo soportar una demanda y un juicio si eso contribuye a la democracia y la transparencia”, señaló Rodríguez.
Para el funcionario, más que la imagen de una persona “el punto clave es rendir cuentas ante la población”. Según Rodríguez, “la justicia se puede ocupar para enjuiciar o eludir (una acción penal), pero también se pueden usar las demandas para amenazar”.
Respecto a los señalamientos de presunto nepotismo hechos en su contra debido a que su esposa y su hija trabajan en el Estado, Rodríguez afirmó que ambas ingresaron a trabajar antes que él fuera nombrado con un cargo en el gobierno del presidente Mauricio Funes.
Lo anterior hace imposible un acto de nepotismo de su parte porque él no se aprovechó de un cargo público para que miembros de su familia sean contratados, aseguró. A ello se añade que tanto su esposa como su hija pueden demostrar su competencia para ejercer el cargo que les ha sido asignado, argumentó. “Mi señora es master en salud pública y mi hija estudió en Cuba y es de las 15 personas que fueron galardonadas como las mejores (estudiantes)”, afirmó.
Aseguró Rodríguez que él mismo se presentará este día al Tribunal de Ética para que dicha instancia investigue sobre las acusaciones de nepotismo hechas en su contra por personas como el diputado de ARENA, David Reyes. “Voy a pedir que investigue el caso Orestes Posada (abogado), sobre presunto nepotismo”, aseguró.
