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Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
La serie Santa Tecla-Juventud Independiente aún no tiene dueño, viagra pero, see después de la exhibición de boxeo que dieron en el primer round, las papeletas se inclinan a favor del representativo opicano: jugará en casa y con un 3-3 que le da suficiente crédito para buscar el nocaut.
Faltó arte, faltó poesía con la pelota, faltaron lienzos de buen fútbol en Las Delicias, pero, a cambio, los tecleños y los opicanos ofrecieron un combate de boxeo a puño limpio. Tres veces estuvo en la lona el cuadro de casa y tres veces dobló rodillas la “Juve”.
En casa y cobijado por un buen marco de público, fue el Santa Tecla quien intentó imponer condiciones inicialmente, pero Juventud Independiente se acomodó muy temprano al “cuadrilátero” sintético, y eso le permitió pegar primero.
Mauricio Perla sufrió un ataque de habilidad, aprovechó un saque de banda, bajó el balón con pecho y, en bolea, sacó un zurdazo que dejó para la foto al meta Juan José Trinidad. La fiesta de los “rojos”, sin embargo, solo duró 60 segundos, el tiempo que tardó el anfitrión para responder y poner las cuentas parejas.
El zaguero central, Iván Mancía, que se iría lesionado minutos después, logró al minuto diez decretar el 1-1 en un cabezazo secó a la esquina derecha. A partir de la paridad, Santa Tecla, con Gerson Mayen y William Maldonado en labores de creativos, intentó gobernar la pelota, pero se le hizo difícil ante el marcaje y poco espacio que dejaba la visita en la zona ancha. Además, Herbert Sosa llegó al juego enchufado y, cada vez que recibía la pelota, sonaba la corneta y complicaba en ataque al cerrojo defensivo parado por Osvaldo Escudero.
Pese a la falta de claridad y la escasez de opciones que generaba la batalla en el medio campo, Santa Tecla se las arregló para generar un par de llegadas.
Irvin Herrera se fabricó su primera chance al ´25, pero su remate salió desviado y, luego, Maldonado obligó a Julio Martínez a desviar un balón hacia el tiro de esquina.
La “Juve” también dio muestras de querer la victoria con un remate de Sosa que se fue pegado al poste sobre el minuto 40 y, luego, el mismo jugador se fabricó una falta justo al cierre de la primera etapa.
La falta, al 45+1, la cobró Perla y el balón salió justo sobre la barrera hasta terminar en el fondo de la red. Mauricio dejaba una “perla” más a segundos de cerrar el telón.
Así, los pupilos de Juan Ramón Sánchez se fueron a las duchas nuevamente con una leve ventaja que, más tarde, se les escabulló de las manos como agua de regadera.
Un minuto tenían de reiniciadas las acciones cuando Irvin Herrera cogió un pelotazo largo, ganó las espaldas a la zaga y definió sobre la cabeza de Julio Martínez que salió apresurado.
El encuentro volvió a emparejarse, el 2-2 reflejaba exactamente lo que ocurría en la cancha: un partido disputado, falto de geometría futbolera, sin pases de cirujano y, consecuentemente, sin llegadas a puerta.
No obstante, la “Juve” se las arregló una vez más para activar el grito de gol. Al ´57, Juan Díaz recibió un balón de Sosa, enfiló sobre el centro y sacó un violento disparo desde fuera del área para dejar, de nueva cuenta, a Trinidad con la estirada inútil.
El tanto pellizcó los ánimos tecleños, que a ratos dieron la sensación de perder la fe de conseguir un resultado honroso. Ricardinho, el hombre que tantas alegrías les había dado en fechas pasadas, esta vez era solo una figura decorativa; pero Irvin seguía martillando y con la portería en la mira.
Fue a este “9” a quien debieron encomendarse en los minutos finales, y fue quien les devolvió la esperanza después de pillar de nuevo a la defensa y anotar el segundo en su cuenta a escasos cinco minutos del final. El 3-3 volvió a dar a ánimos a los tecleños y obligó a los opicanos a refugiarse para cuidar el resultado.
Al terminar el encuentro, el marcador ya no se movió y dejó el pase a la final a la espera de dueño.
