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Yaneth Estrada
@caricheop
A petición de la periodista mencionada en una nota publicada en el medio digital La Página, el IDHUCA trasladó a la opinión pública el siguiente mensaje, elaborado libre y valientemente por ella misma.
“La Página nunca ha hablado conmigo, nunca he contado mi historia a uno de sus reporteros, ni me contactaron antes o después de sus publicaciones”, dice la periodista citada, bajo el seudónimo Marta.
Asimismo, señaló que este medio actualmente está bajo la dirección del Consejo Nacional de Administración de Bienes (CONAB), una dependencia del Estado, controlada por el Gobierno de turno.
“Niego que haya sido víctima de violación o cualquier otro tipo de abuso o acoso sexual en el evento que La Página relata. Es cierto, que luego del convivio en el Lago de Coatepeque, varios compañeros de la redacción de El Faro que estuvimos en 2017, me queje ante la dirección del periódico por un comportamiento inadecuado de un compañero durante el mencionado evento, expresamente solicité que no hubiera una sanción interna grave, no me consideré, ni me consideró ofendida o víctima de algún delito durante el evento”, dice la periodista.
Mientras tanto, explicó que su intención era para mejorar la convivencia en la redacción y que luego de la queja se tomaron ciertas decisiones. “Expreso mi preocupación ante una posible complicidad de la Fiscalía General de la República (FGR) en la instrumentalización de mi caso, luego que la página revelara detalles de mi declaración ante esa institución y la tergiversación. Acudí a una sede fiscal el jueves 16 de julio, acompañada por mi apoderado legal, luego de que por las mencionadas publicaciones se abriera un caso de oficio, ante estos hechos temo por mi integridad personal y la de mi familia. A la opinión pública le informo que por mi seguridad he pedido que se me resguarde mi identidad y solicite ante la FGR la reserva del caso. Les pido que me respeten mis decisiones”, concluye.
Las reacciones
Al respecto, el fiscal general Raúl Melara respondió: “La entidad está obligada a investigar todo hecho de violencia; sobre todo, el cometido en contra de las poblaciones más vulnerables. La FGR no es instrumento político de nadie; y nuestra prioridad es proteger a las víctimas y encontrar la verdad, la investigación sigue”.
“Hay ejemplos donde el Estado (ahora la FGR) es cómplice de violaciones de derechos. Este relato evidencia la filtración de información confidencial, y cómo es usada para desinformar y manipular. Debería preocuparnos. Después nos preguntamos por qué nadie cree en la denuncia”, dijo la periodista Julia Gavarrete. También la abogada Bertha María de León cuestionó duramente a la FGR, ¿cuáles son los criterios para priorizar atención de casos? Porqué es más importante agotar la investigación de un chambre publicado en un sitio de dudosa credibilidad”. “Todo esto desalienta a las víctimas y las lleva a desconfiar en la FGR, por eso muchas no denuncian”, enfatizó.
Según datos del Instituto de Medicina Legal, (IML) en 2019 se realizaron 2,894 reconocimientos por violencia sexual, es decir, 8 casos diarios. Además, el 75 % de abusos se cometió en niñas y adolescentes menores de 17 años, incluyendo 848 casos de niñas menores de 11 años.
