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Yaneth Estrada
@caricheop
Según la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples correspondiente al año 2017, la tasa de desempleo en El Salvador es del 14.4 % en edades de 16 a 24 años y de 5.1 % en personas de 25 a 59 años.
El nivel de acceso a educación superior también es limitado, ya que de los aproximadamente 88,000 bachilleres que culminan su educación media solo la mitad continúa sus estudios universitarios. A lo largo de la carrera (entre 3 o 5 años), de los 44,000 alumnos que ingresan, solo el 8 % obtiene su título, cerca de 3,520 estudiantes para obtener un sueldo neto de 300 o 500 dólares mensuales.
Es así como en enero de 2014 bajo el mandato del Presidente Salvador Sánchez Cerén nace el primer Centro de Formación para Marinos Mercantes en la base Naval de La Unión, con apoyo interinstitucional entre los ministerios de la Defensa, Obras Públicas (MOP) y la Autoridad Marítima Portuaria (AMP), con el cual buscan preparar marinos en El Salvador, generar oportunidades para jóvenes en situaciones de exclusión y pobreza garantizando el cumplimiento de leyes y tratados laborales.
El financiamiento para este primer centro de formación fue otorgado por la Comisión Centroamericana de Transporte Marítimo (Cocatram) y la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), cuyo costo rondó los 500 mil dólares.
Tras mucha dedicación, luego de un mes de preparación por 24 maestros especializados, 15 jóvenes de la primera promoción de marinos mercantes salvadoreños fueron colocados a través de la Agencia Marítima IBERNOR en buques crucero de países como Italia y Chipre para ocupar cargos como segundos cocineros, bartender, asistentes de cabina y recepcionista con sueldo inicial de $1,200.
Asimismo, más de 100 jóvenes marinos salvadoreños se encuentran ahora a bordo de embarcaciones propiedad de compañías como Royal Caribbean. En este sentido y con una nueva profesión en creciente demanda mundial, El Salvador establece la Ley Reguladora para la Contratación y Colocación de Gente de Mar en buques extranjeros para garantizar el cumplimiento de los derechos laborales de los jóvenes marinos mercantes.
Un mar de sueños
y oportunidades
Sonriente y soñador, Alan Cruz fue parte de la primera promoción de marinos mercantes de El Salvador y gracias a este esfuerzo fue cuatro veces embarcado en territorios y aguas europeas a través de la empresa IBERNOR.
“Todos entramos a un proyecto sin conocer qué frutos nos traerá. Somos la cara de El Salvador a nivel mundial, independientemente en la compañía que vamos a navegar, de cada uno de nosotros depende que los empleadores digan ‘quiero más gente salvadoreña’”, recalcó con orgullo, luego de desayunar el sábado con el Presidente de la República Salvador Sánchez Cerén y su esposa Margarita Villalta de Sánchez en Casa Abierta.
Actualmente, esta apuesta por la juventud y la calidad de la mano de obra salvadoreña cuenta con dos Centros de Formación de Marinos Mercantes, modernos y con estándares internacionales, en La Unión y en San Salvador, con capacidad de formar hasta mil marinos por año. Además, el Ministerio de Trabajo lanzó una nueva convocatoria este año, para otorgar 800 becas a jóvenes interesados en los municipios de San Salvador.
