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Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Este fin de semana en Sonsonate fue la vela y el entierro de la salvadoreña asesinada en México, Victoria Salazar, quien residía en dicho país con una visa humanitaria. La repatriación fue gracias a las gestiones del Estado salvadoreño con el Estado de México.
Fue en Quintana Roo, México, donde agentes de la policía municipal de Tulum asesinaron a la salvadoreña Victoria Esperanza Salazar Arriaza, luego de ser sometida por los elementos “de seguridad” con una fuerza brutal que le dañaron la parte superior de la columna, lo que le llevó a la muerte de la mujer que únicamente buscó la protección en un país que no se lo cumplió, dado que en el suyo tampoco la encontró.
Repatriación
En cuanto a la repatriación del cadáver el Estado de El Salvador, a través de Cancillería, brindó la atención y apoyo a la familia de Victoria Salazar, cuyo cuerpo llegó el sábado al país en un proceso de repatriación coordinado con el Estado de México. Su cuerpo fue velado en la noche en la funeraria La Auxiliadora, en Sonsonate, departamento del que era oriunda Victoria.
La familia de Victoria no quiso la presencia de los medios de comunicación en la vela, ya que eran los últimos momentos para despedirse. El dolor que emanaban los familiares era tremendo, al parecer, aun no pueden creer el hecho que Victoria ahora esté muerta a manos de policías.
El padre de Victoria, Edwin Alfonso Olivares, expresó muy melancólico que “esto cuesta digerirlo, esto trae un montón de emociones encontradas, hay mucho dolor y consternación (…) es indescriptible”, aseguró.
Entierro
El último adiós para Victoria fue ayer domingo, en el Parque Jardín La Generosa, en Sonzacate, donde familiares lloraban ante el cuerpo sin vida de Victoria. Verla dentro del ataúd, es una gran tristeza, más sabiendo que no pudieron hacer algo al respecto en sus últimos respiros, es lo que expresaban las miradas de los acompañantes.
Los familiares y amigos llegaron en buses y con arreglos florales a dos manos para rendir homenaje a la salvadoreña, durante su sepelio en dicho lugar.
El asesinato y caso
El asesinato de Victoria, de 36 años, ocurrió el sábado 27 de marzo, cuando 3 hombres y una mujer policías de Tulum la detuvieron con un uso excesivo de la fuerza hasta romperle la columna vertebral, lo cual le provocó la muerte. Estos agentes ya están siendo procesados por las autoridades mexicanas, según detalló la Fiscalía de Quintana Roo. Incluso, el director de Seguridad Pública y Tránsito de Tulum en Quintana Roo, Nesguer Ignacio Vicencio Méndez, fue destituido de su cargo por los mismos hechos.
Además, la pareja sentimental de Victoria fue capturado por presuntamente haber abusado sexualmente de una de las hijas de la ahora fallecida.
Victoria Salazar llegó al país azteca en el 2017, al parecer, escapando de la violencia de género que con ella transitaba en las calles de Sonsonate. Durante su poca instancia en México, trabajó en un hotel de la zona de Quintana Roo. Consigo tenía una visa humanitaria, según las declaraciones del director Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), Andrés Ramírez.
Desde que se conoció el hecho, el presidente de la República, Nayib Bukele anunció que brindaría apoyo a través de las instituciones del Gobierno de El Salvador, incluyendo la manutención y estudios de sus dos hijas (menores de edad, de 16 y 15 años), que regresaron al país junto con la madre de Victoria, Rosibel Salazar. Estas menores contarán con el apoyo de instituciones como la del Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia (CONNA) y otras instancias especializadas en estos temas.
Solidaridad para la familia de Victoria
Este hecho ha conmovido a la comunidad internacional, por el abuso de tres agentes hombres y una mujer contra una salvadoreña que ha sido comparado como el caso ocurrido en Estados Unidos, cuando, agentes policiales asfixiaron al estadounidense afroamericano George Floyd.
Incluso, las organizaciones en El Salvador que velan por los derechos de la mujer expresaron su repudio ante el asesinato de Victoria y exigieron castigo para los responsables, pero, además, que estos hechos no deben suceder, y condenaron la brutalidad policial, y se pronunciaron contra la misoginia y el racismo.
“Como mujeres somos muy afectadas por el tema de las protecciones del Estado salvadoreño y, por lo tanto, estamos obligadas a migrar, buscando protección, y no es posible que en el país que nos acoge como migrante nos desprotejan y violen nuestros derechos humanos, por eso exigimos justicia por Victoria y por todas las vidas de los migrantes que han muerto en México y que no se ha visibilizado su muerte”, expresó días atrás, Krissia Aquino, de la Asociación de Mujeres Ixchel.
El arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, también se solidarizó con la familia de Victoria. “Como salvadoreños lloramos esta muerte y la de otros compatriotas que han padecidos estos maltratos y pedimos a las autoridades que haya verdadera defensa de los derechos de los migrantes”, expuso.
Escobar Alas agregó que la muerte de Salazar significa el drama que sufren a diario los migrantes en su búsqueda de mejores oportunidades en otros países.
Por ahora, tanto familiares como amigos y defensoras de derechos humanos piden justicia para que los culpables de este crimen paguen con cárcel.
