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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Hacemos un llamado al Gobierno en el marco de la Emergencia Nacional a abrir las puertas de la participación social de todos los sectores que consideramos tenemos algo que aportar; estamos en disponibilidad y sabemos del manejo de albergues y experiencia en contraloría social para identificar casos”, afirmó Margarita Posada, de la Coordinadora Salvadoreña de Movimientos Populares (CSMP).
En su pronunciamiento público, Posada recordó cómo este liderazgo social y comunitario pudo identificar el primer caso de Chikungunya en el país (por medio del Foro Nacional de Salud), cuando se valoró un caso en el municipio de Ayutuxtepeque, que fue reportado al Ministerio de Salud para que desplegara todo un protocolo de atención médica y prevención.
Reunidos en alianzas, redes y organizaciones, la Coordinadora señaló como positivo el “sentido de la prevención” y la declaración de Estado de Emergencia, que provee de fondos financieros y recursos materiales al Ejecutivo, por la pandemia que a la fecha ha afectado a más de cien países, que incluye a la región centroamericana.
No obstante, rechazaron el “Estado de Excepción”, a través de la Ley de Restricción Temporal de Derechos Constitucionales, al valorar que es innecesario y un motivo de preocupación por los antecedentes del 9 de febrero pasado, cuando el presidente Nayib Bukele “evidenció una acción autoritaria” al querer obligar a la Asamblea Legislativa la aprobación del préstamo de 109 millones de dólares para seguridad.
“El gobierno del presidente Bukele ha sido mencionado por o señalado por marginar periodistas y las agresiones contra este gremio; entonces, nos preocupa que se violenten los derechos humanos y transgredir las reglas democráticas. Es una lástima, también, que se cierren y militaricen los albergues, porque no es la mejor manera de manejarlos o abordar cuando ya existan casos. Se debe estar pendiente permanentemente de cómo va la situación; son 1,200 albergados y solo han aplicado 37 pruebas, es algo que uno cuestiona”, agregó. En cuanto a la compra de seis mil dosis de vacunas a Cuba, que ya está probado que cura el coronavirus, Posada sugirió que toda esa información en un Estado de Emergencia debe ser del conocimiento de la población porque ha sido deficiente hasta la fecha.
Asimismo, Carolina Amaya (UNES) señaló que todavía hay mucha improvisación en la gestión de prevención, cuando como organizaciones sociales han venido reiterando la necesidad de una ley de protección civil reactiva, correctiva y prospectiva, y por la Emergencia Nacional ha quedado en evidencia un retroceso en ese tipo de gestión.
“Nosotros ayer esperábamos que la ministra de Salud (Ana Orellana) diera datos en dónde está la gente, cuánta gente es y cómo están ubicados, cuántas pruebas aplicadas, esa información que es importante, porque es información clave para tomar decisiones.
Y solo vimos un gobierno presidencialista y un representante de la OPS, que parecía que mandaba un mensaje a la comunidad internacional y no para la sociedad salvadoreña”, indicó.
Asimismo, la Coordinadora alertó que, en el marco de la “Emergencia Nacional”, se busque imponer medidas económicas que vendrían a afectar la vida de la mayoría de salvadoreños, al reseñar el libro de la periodista canadiense Naomi Klein, “Teoría del Shock y Capitalismo Desastre”, que plantea el uso del pánico colectivo para ajustes neoliberales que exige el Fondo Monetario Internacional (FMI) que aumenta el endeudamiento público.
“Reprobamos el enfoque propagandístico y el sesgo electorero con el que el presidente (Nayib) Bukele y su equipo manejan en la emergencia contra el coronavirus. Sabemos que él busca reposicionar su imagen que fue fuertemente deteriorada por el lamentable episodio del 9F, por la actitud antidemocrática que generó rechazos de sectores nacionales y la comunidad internacional; es por esto que demandamos eficiencia y efectividad en todas las amenazas del coronavirus”, sostuvo Amaya.
