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Cerca 179 organizaciones acordaron la conformación de la Coordinadora Salvadoreña de Movimientos Populares (CSMP), con el propósito de desmontar el modelo neoliberal y promover transformaciones estructurales que favorezcan a la población y conduzcan a la construcción de un país democrático, justo, equitativo, incluyente y sustentable.
El objetivo de la CSMP es impulsar estrategias para que las instituciones estatales, como el gobierno central, Asamblea Legislativa, sistema judicial y Fiscalía General de la República (FGR) actúen en función de los derechos y demandas de la población, y no favorecer los intereses de las élites empresariales, cúpulas partidarias y sectores pudientes.
Entre las propuestas de la Coordinadora están la aprobación de una política tributaria progresiva, donde paguen los que mas tienen, la lucha contra la corrupción, la depuración del sistema judicial, la aprobación de leyes ambientales, políticas integrantes de seguridad pública, la democratización de las comunicaciones y los derechos de las mujeres.
Según los representantes de las organizaciones, ante la situación actual que vive el país se hace necesario la unificación y crear una agenda común por resolver los problemas estructurales, debido a la actitud del nuevo gobierno que ha tomado una agenda neoliberal e impone un estilo populista, autoritario y demagógico, pues en estos cuatro meses se ha caracterizado por arbitrariedades y abusos de poder, restringir la libertad de expresión y desmontar política sociales.
Asimismo, consideraron que el presidente bukele utiliza el respaldo social expresado en las encuestas para llenarse de vanidad y soberbia, alimentar su egocentrismo, descalificar las críticas y arremeter contra sus adversarios políticos, en vez de utilizarlo para abordar seriamente los problemas del país y promover los cambios que ofreció.
Las organizaciones y movimientos sociales enfatizaron que El Salvador vive un momento histórico de grandes desafíos que requieren la actuación decidida, debido al grave deterioro ambiental, escandalosos niveles de desigualdad, crisis migratoria, violencia e inseguridad, dependencia alimentaria y otros problemas causados por el modelo neoliberal y que podrían profundizarse durante la nueva administración.
El modelo capitalista neoliberal ha provocado una altísima concentración de la riqueza, una injusta distribución de los ingresos, que tiene a la base un esquema de bajos salarios para la clase trabajadora y una estructura fiscal regresiva, donde pagan más quienes menos tienen. Las grandes empresas evaden anualmente 1 mil 500 millones de dólares, una veintena de leyes permiten la elusión y los ricos tienen exentos de impuestos su patrimonio, grandes ganancias y los bienes y servicios de lujo.
Esta regresividad tributaria no sólo incrementa la concentración de la riqueza en pocas manos, sino que también impide al Estado tener recursos suficientes para atender los problemas nacionales y las necesidades de la población, frente a esta situación los gobiernos han optado por endeudar progresivamente al país adquiriendo préstamos que en muchos casos fueron a parar al saco de la corrupción política y privada.
