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Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
Atlético Marte encontró oro en el césped del Estadio Óscar Quiteño. El equipo carabinero “cavó” profundo en la interna y dirigencia tigrilla que fue testigo también de una marcha de protesta encabezada por la “Turba Roja”.
El cuadro bombardero aprovechó el oportunismo en el juego aéreo de Léster Blanco y las riquezas técnicas de Édwin Sánchez para sorprender a un FAS fallón y que acabó por pagar caro las ocasiones desperdiciadas.
No fue FAS inferior a los marcianos, treatment pero tuvo menos puntería y fortuna en los últimos metros para doblegar a Atlético Marte, check que llegó al Óscar Quiteño y jugó sin mayores complejos.
Conducidos por Cristian Álvarez, fueron los tigrillos los dueños de la pelota en los primeros compases, pero fue el cuadro bandera quien pegó primero. Édwin Sánchez taconeó un balón para la corrida de Romeo Monteagudo y este centró preciso para el cabezazo de Blanco a los 15 minutos.
El mazazo hizo reaccionar a los pupilos de Agustín Castillo que buscaron con insistencia el gol de la paridad durante el primer acto, pero no tuvieron fortuna. Al ´43, el brasileño Josimar Moreira despintó el horizontal con un derechazo desde los linderos del área.
La espera por el empate, sin embargo, no se hizo esperar. Ni un minuto tenía reanudado el juego y FAS ya festejaba el 1-1. La anotación fue obra de José Ángel Peña.
Al ´46, el ariete aprovechó un centro desde la derecha y mandó la pelota al fondo de la red con un cabezazo inatajable para el portero Dennis Salinas.
En adelante, con un Moreira más enchufado, los santanecos confeccionaron varias ocasiones de gol, pero les faltó tiza; mientras que Marte aprovechó un centro de José Amaya para que Léster, nuevamente de cabeza, decretara el 1-2 sobre el ´67.
El festejo de los carabineros, no obstante, duró poco pues, al ´71, Josimar le quebró la cintura a Kenny Lemus y venció a Salinas para el 2-2.
Hasta ahí, el duelo pactaba un justo 2-2, pero faltaba la última diablura de Sánchez. El “inter” cogió un balón, desbordó y, con un remate colocado, dejó petrificado a Luis “Motor” Contreras. El cronómetro marcaba ya los ´82 minutos y FAS ya no alcanzó a reaccionar.
Así, Marte, descendido el torneo anterior, comienza a devengar los 100 mil dólares que pagaron por volver a primera. Junto a Santa Tecla, los marcianos encabezan la tabla en el arranque del torneo. Y es que en Las Delicias, el Santa Tecla sacó la franela y pasteó con “robin” la copa conseguida el torneo pasado. El cuadro tecleño impuso sus condiciones y se llevó una cómoda victoria sobre Juventud Independiente de Opico.
Los arqueológicos pusieron resistencia en el inicio del juego, pero, poco a poco, cayeron en el dominio de los locales y la derrota se escribió desde muy temprano.
Al monopolio del balón, los dirigidos por Osvaldo Escudero, le pusieron gol en un balón rebotado que quedó para los botines de Iván Mancía, quien le sacó petróleo con un remate suave, pero inalcanzable para el portero Wilber Martínez.
Apenas 21 minutos tardó Santa Tecla para derribar el muro defensivo levantado por Jorge “el Zapatero” Ábrego y comenzar a confeccionar su primera victoria del campeonato. Y es que más conjuntado y con mejores recursos humanos, Santa Tecla tuvo control del juego a lo largo de los 90 minutos, dejando pocas rendijas para que la “Juve” soñara, al menos, con un empate. Irvin Herrera, al ´37, anotó el segundo para los tecleños y botó cualquier posibilidad de reacción de los opicanos que, sin embargo, lograron evitar que la artillería del Santa Tecla les causara daño en la etapa complementaria. Parte de culpa la tuvo William Maldonado, el creativo de los tecleños, que había hecho un buen partido, vio cartulina roja al ´76 y dejó a los de casa en inferioridad numérica. Aparte, Derby Carrillo dejó el partido por una dolencia física.
Morados de felicidad
El sábado, antes que iniciara el juego en el Estadio Gregorio Martínez de Chalantengo, el panorama pintaba tenebroso. Los faroles que alumbran el “Sombrero” se apagaron y el escenario que quedó a merced de la luz que dibujaban los relámpagos en el horizonte. Cualquiera que crea en supersticiones habría diseñado una noche oscura en el debut en Primera División de los chalatecos, pero lo cierto es que el equipo alacrán hizo un partido acorde a las exigencias y las dificultades que genera un juego saliendo de pretemporada.
Los pupilos de Juan Andrés Sarulyte le plantaron cara a Isidro Metapán. Incluso, estuvieron a poco menos de 10 minutos para sumar su primera victoria en el regreso a la liga de privilegio.
Como era de esperarse, a estas alturas del torneo, el duelo entre cementeros y norteños no abundó en espectáculo, más bien fue un juego áspero y peleado con más orgullo que técnica. Pero no faltó el gol.
Las primeras opciones de abrir el marcador corrieron por cuenta de los caleros que probaron en un par de ocasiones al portero Ismael Valladares. El festejo, sin embargo, lo destaparon los alacranes con anotación del ex marciano Manuel Otero. El ariete aprovechó una gran asistencia de Elder Figueroa para dejar crucificado a Henry Hernández. El cronómetro cruzaba los 52 minutos y el panorama de gris pasaba a festejo para la hinchada chalateca que ya extrañaba a su equipo mimado en el circuito privilegiado.
El tanto despertó a los jaguares que, en adelante, buscaron con insistencia el gol que les permitiera, al menos, sumar de visita. Y la ambición dio fruto al ´83, cuando el debutante Cristian Cisneros aprovechó un balón servido por Ricardo Ulloa para vencer, con remate potente, a Valladares.
Antes de la anotación, Valladares fue clave para mantener la ventaja, ya había ahogado antes el grito de Odir Flores desde el tiro libre. Al final, el partido dejó un honroso 1-1.
Sonsonate tampoco perdió en su debut. El cuadro cocotero sorprendió al Pasaquina en la cancha de San Sebastián y volvió a casa con un 1-1 que sabe a victoria. Los sonsonatecos se escudaron en su zona baja y, a partir de ahí, plantearon un juego que les permitió salir con vida en su vuelta a la Liga Mayor. Rodolfo Pimentel, a la media hora, decretó el 0-1 favorable a los cocoteros. El volante disparó y tuvo la fortuna que el balón se desvió en la pierna de Glauber Da Silva y acabó en el fondo de la red.
La anotación fue un balde de agua fría para los “Burros” que, hasta ahí, habían dominado el encuentro y habían gozado de las mejores ocasiones.
Eso sí, nunca se desesperaron y el premio llegó al ´56, con el tanto de Neimer Miranda que valió para el 1-1 definitivo. Tanto los orientales como los occidentales buscaron la victoria, pero el destino selló
división de honores para ambos, pero, sobre todo, para los sonsonatecos.
