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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Sin agua no hay futuro”. Ese fue el mensaje protagónico en cántaros, pañoletas, máscaras y pancartas que alzaron diversas organizaciones, que integran la Alianza Nacional contra la Privatización del Agua, en su marcha para sumarse a las actividades de la Huelga Mundial por el Cambio Climático, que interpela los discursos presidenciales de diversas naciones, en el marco de la Cumbre Climática de las Naciones Unidas.
“Tenemos una corresponsabilidad en el cuido del medio ambiente y es urgente que todos y todas nos involucremos en proteger este entorno, del cual formamos parte y nos brinda vida”, dijo Luis González (UNES), al señalar que el calentamiento global se ha incrementado desde los años ochenta y esta causando grandes problemas al planeta.
Sobre su pronunciamiento, la Alianza reiteró que la crisis planetaria tenía su origen en el modelo de producción capitalista, por tanto los principales responsables del aumento en la temperatura, que esta llevando a sequías más frecuentes o inundaciones por lluvias intensas en un espacio corto de tiempo.
Asimismo rechazaron la propuesta que presentó ante la ONU el ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) Fernando López, que planteó una reconversión agrícola, enfatizada en monocultivos de caña de azúcar y palma aceitera, pese a la crisis ambiental y el estrés hídrico del territorio nacional.
“Lamentamos las declaraciones del ministro de Medio Ambiente en Nueva York, en la Cumbre de Cambio Climático, porque sin duda demuestra la falta de conocimiento de la magnitud de la crisis ambiental y climática de El Salvador, porque tenemos indicadores nefastos en materia ambiental”, sostuvo González.
Asimismo, Juan de la Cruz del BPJ y que integra la Alianza consideró, que la “simpatía” que expresaba el presidente Nayib Bukele, con su homólogo estadounidense Donald Trump, era preocupante, porque esa administración ha dado muestras de ser “reaccionario, misógino y racista”, vulnerando a la población salvadoreña que migra en busca una nueva oportunidad de vida.
“Habla (presidente Nayib Bukele) de que se necesita invertir, pero no dice que esa inversión, necesariamente, vendrá a destruir nuestros bosques, controlar nuestra agua y explotar nuestros recursos naturales. Esto solo expresa que no están en favor de los más pobres, porque realizan una inversión, que no es racional; este es el mensaje desde la presidencia”, valoró de la Cruz. Datos del Ministerio de Medio Ambiente (MARN) dan cuenta de que El Salvador cuenta con 360 ríos que se conectan para formar diez regiones hidrográficas, y que dispone cada año de 19 mil 48 millones de metros cúbicos de agua (mmc), cantidad aceptable para que la población recibiera agua; pues tiene un consumo nacional de mil 884 millones, que significa el 9 % del total disponible.
Morena Murillo del Foro Nacional de Salud demando también la “urgente” necesidad de dotar al país con una Ley General de Aguas, priorizando la demanda del consumo humano, antes de regular a los sectores productivos.
“Sabemos que no somos los mayores contaminantes; pero si caemos en el consumismo debemos revisar nuestros estilos de vida. Y los que tenemos la suerte de contar con agua en casa, vamos a ser los primeros afectados, porque derrochamos y contaminamos un recurso tan importante. Porque sabemos que a las grandes empresas no les importa la vida ni salud de la persona, entonces no caigamos en su sistema de consumir y desechar todo, como nos obligan las empresas con sus productos. Y recordemos: el agua es un bien nacional”, sentenció.
Son trece años de espera por una Ley General de Aguas, desde el primer anteproyecto presentado por el Foro del Agua en año 2006, luego el gobierno del expresidente Mauricio Funes, a través del Ministerio de Medio Ambiente en el 2011, y un último aporte desde la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” (UCA), que no ha logrado sobrepasar las trabas de la derecha legislativa. También han hecho sus propuestas los tanques de pensamiento como FUSADES y la ANEP.
Voces internacionales en materia de derechos humanos y la mujer (como ONU MUJERES) han sido enfáticas en la necesidad de enfocar esfuerzos combinados, para enfrentar el cambio climático que vulnera el planeta, en especial la protección de la mujer en áreas rurales o comunitarias.
“El impacto de la carencia del agua o el acceso a fuentes confiables de agua para las mujeres es tremendo, porque sobre la espalda de las mujeres recae el resolver el trabajo doméstico y tienen que resolver cuando no hay. El problema del agua es un problema grave”, afirmó Ana Elena Badilla representante de ONU Mujeres en El Salvador, en la inauguración del Seminario de Inclusión Financiera.
Asimismo, recalcó que el agua es un derecho humano para todos y todas; por lo cual invitó a todos los actores sociales a contribuir junto a las autoridades locales y nacionales por un marco jurídico incluyente y efectivo, para el acceso y el goce de agua potable para consumo humano. “Debemos trabajar en el ámbito local y nacional en la toma de decisiones sobre la gerencia y el manejo del recurso agua. Y esa tiene que integrarse en una política más integral de conservación del medio ambiente. Nosotros trabajamos estrechamente con el grupo parlamentario de mujeres y la comisión de la mujer (Asamblea Legislativa), entonces es un tema que vamos a conversar con ellas, cuando dispongan su agenda legislativa”, puntualizó.
