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Tras estar sometidos más de 80 días a una cuarentena obligatoria -por el COVID-19-, miles de salvadoreños regresaron a sus actividades diarias en las empresas que han sido habilitadas para funcionar en la fase 1 de la reapertura económica.
El Plan de Reactivación de la Economía -en su fase 1- habilita el funcionamiento de rubros como construcción, manufactura textil y electrónica, veterinarias (citas y emergencias), salones de belleza y barberías (con cita), docentes y administrativos de centros educativos, servicios de reparación y mantenimiento, servicios de imprenta y otros.
De acuerdo con el Gobierno, durante esta primera jornada de apertura, “los salvadoreños cumplieron con el uso de la mascarilla, incluso, cuando viajaban en sus vehículos particulares”.
“En las principales vías de ingreso a la capital no hubo inconvenientes en cuanto a la circulación vial (…), en la zona del bulevar Constitución, al norponiente de San Salvador, el tráfico también fue moderado, con bastante presencia del transporte de carga. En la calle al volcán, en el sentido de oriente a poniente, se registró una alta carga vehicular”, detalló.
Cabe destacar que, hasta el 6 de julio de 2020, solo está autorizado el transporte de carga, particular de los empleados de sectores habilitados, el de uso grupal de empleados y selectivos o vehículos privados para este propósito.
El Ejecutivo informó que se han establecido protocolos específicos para el funcionamiento de cada empresa, que estarán en constante monitoreo por parte del Ministerio de Trabajo para verificar que se cumplen las medidas preventivas.
“No hay empresario exitoso sin trabajadores, por eso el eje fundamental es cuidar de la salud de ellos. La clave está en el diseño de los protocolos y la estricta aplicación”, manifestó el ministro de Trabajo, Rolando Castro, quien aseguró que la institución trabaja en determinar si se cumplen las medidas de bioseguridad en las empresas, caso contrario tienen la facultad para tomar una decisión fuerte, como el cierre de las empresas. Según el Gobierno, además del cumplimiento de estos protocolos, “las empresas deben de dar cumplimiento a la regla de que solo haya presencia física de los empleados en los lugares de trabajo, solo en aquellos casos en que la asistencia sea estrictamente necesaria, de lo contrario, deben ejercer sus labores por medio del tele trabajo”.
La reapertura económica está prevista en cinco fases, la primera con un plazo de 21 días y las siguientes con una duración de 15 días cada una.
La fase 2 iniciará el 7 de julio, y abrirán las industrias creativas, de calzado, cosméticos, plástico, papel y cartón, así como el transporte público.
La fase 3 será a partir del 22 de julio, y abrirá el comercio al menor y por mayor, las iglesias, lugares de culto, entre otras. En la fase 4, que será a partir del 6 de agosto, se restablecerá el turismo interno e internacional y las operaciones en el Aeropuerto Internacional. En la 5, prevista para el 21 de agosto, se reanudarán las actividades de carácter social.
Las autoridades pidieron a la población que durante este proceso de reapertura continúen cumpliendo las medidas sanitarias como el uso de mascarilla, lavado de manos con agua y jabón, así como mantener el distanciamiento físico, para evitar estar expuestos ante el contagio de COVID-19.
