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Yanuario Gómez
@DiarioCoLatino
Luego de la avalancha de comentarios negativos provocados por la decisión de Norman Quijano, presidente de la Asamblea Legislativa de construir un nuevo edificio de oficinas debido a la vulnerabilidad que presenta el actual inmueble, el diputado pidió al ejecutivo apoyo para salvaguardar la vida de los empleados del primer órgano de Estado.
El parlamentario solicitó a través de Twitter en primera instancia y posteriormente en conferencia de prensa el apoyo del Presidente de la República Salvador Sánchez Cerén por medio de la asignación de un inmueble estatal para trasladar las oficinas de diputados y empleados del congreso salvadoreño.
“Estoy pidiendo el apoyo del Presidente Salvador Sánchez Cerén para obtener instalaciones adecuadas para el personal de la Asamblea Legislativa y cientos de personas que nos visitan a diario, acabo de recibir el informe del ministerio de trabajo en el que me da 60 días de plazo para abandonar estas instalaciones”, dijo el diputado presidente del órgano legislativo.
Quijano dijo sentirse preocupado por la seguridad de más de dos mil empleados del congreso salvadoreño, ya que sobre sus hombros recae la responsabilidad de desarrollar acciones para solucionar el problema de vulnerabilidad de las instalaciones legislativas.
El legislador consideró como opciones de inmuebles que el Ejecutivo puede asignar al primer órgano de Estado el edifico de la comisión ejecutiva del Río Lempa (CEL) y algunos pabellones del centro internacional de ferias y convenciones (CIFCO).
“No tengo mayor interés en si se hace el edificio, eso que quede para otros, hay un procedimiento que no puedo obviar pero tampoco estoy renunciando a ello, mi interés primordial es la vida de los trabajadores de esta Asamblea”, sostuvo Quijano, quien además informó que hay un movimiento de empleados que quieren declararse en huelga para no ingresar al edificio legislativo.
El presidente del primer órgano de Estado destacó que muchos de los empleados legislativos no quieren ingresar al edificio por temor a un siniestro, también adelantó que varios trabajadores sufren de problemas nerviosos por esa situación.
El funcionario consideró “demencial” que la opinión pública haga referencia a una gran cantidad de obras materiales y nadie se preocupe por las vidas de más de 2 mil personas que a diario utilizan las instalaciones de la Asamblea Legislativa entre empleados y visitantes.
