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Rosmeri Alfaro
@RosmeriAlfaro
En El Salvador se estima que las niñas y adolescentes de 10 a 19 años de edad son las principales víctimas de agresión en su domicilio; esta es la principal razón de la Asociación de Mujeres Mélida Anaya Montes “Las Mélidas” para exigir que la salud sexual y reproductiva sea incluida en la currícula educativa.
En 2016, Medicina Legal registró 71 niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual; mientras que en el 2017, fueron 136. “Esos son solo los casos que se denuncian, ¿y los que no se denuncian? Por muchas leyes que hayan sentimos que este delito no se para porque hay una conceptualización cultural de que las niñas vírgenes son mejores para los hombres”, puntualizó Delia Cornejo, del Programa de Autonomía de Las Mélidas.
“La sexualidad acompaña al ser humano desde que nace hasta que muere, es el resultado de la interacción de factores biológicos, psicológicos, socioeconómicos, culturales, éticos y religiosos entre personas. Es necesario incluir temas considerados “morbosos” por la cultura del país”, expuso la fuente.
“El cuerpo de la mujer es solo visto como para producir hijos y satisfacción sexual a los hombres, no se les ve como seres humanos; se les ve como un pedazo de carne del cual se puede abusar y esto tiene que ver con el tema educativo, desde que inician los niños hasta que llegan a las universidades”, señaló Cornejo, quien considera necesario cambiar el ideario “conservador” de la familia salvadoreña.
“Yo decido expresar libremente mi sexualidad”, es la campaña con la que Las Mélidas busca exponer el significado de los derechos sexuales en las mujeres, al involucrar el derecho a ser tratadas como personas integrales, no como seres exclusivamente reproductivos, y a ejercer la sexualidad de manera placentera, sin que esta conlleve necesariamente un embarazo.
Del 9 de septiembre al 9 de octubre, la asociación divulgará los derechos reproductivos, los cuales “permiten a las personas tomar decisiones libres y sin discriminaciones sobre la posibilidad de procrear o no, de regular la fecundidad, de disponer de la información y medios para ello”. “Esto va más allá, que nuestros hijos por lo menos se cuiden, si van a tener una relación sexual. Querer una relación sexual no es lo mismo que querer embarazar o quedar embarazada”, señaló.
Según el mapa de embarazos en niñas y adolescentes en El Salvador 2017, ese año se registraron en El Salvador 19,190 embarazos en niñas y adolescentes entre 10 a 19 años de edad; es decir, 53 niñas o adolescentes embarazadas por día.
“Los embarazos no son por consenso de una niña, ella no esta en capacidad de aceptar una relación(…). Un embarazo en una niña de 9 años de edad es un caso delicado, hay muchos casos de deserción escolar y suicidios por casos de embarazo”, expresó.
El documento fue presentado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), en conmemoración del 25º aniversario del Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo, el cual se planteó desde 1994 como objetivo lograr el acceso universal a servicios de salud reproductiva de calidad para todas las personas; pues es fundamental para reducir la pobreza, disminuir la mortalidad materna e infantil, entre otros.
El estudio determinó que en 2016 murieron quince niñas y adolescentes por complicaciones obstétricas, de ahí la necesidad de “retomar el tema de la aprobación de las cuatro causales para despenalizar el aborto”, dijo Cornejo.
Cuando sea para salvar la vida de la mujer gestante y preservar su salud, previo a un examen médico y con su consentimiento; cuando sea un embarazo que fue producto de una violación sexual o trata de personas, cuando existe una malformación del feto que haga inviable la vida extra uterina y en los casos de violación y estupro son las causales que defienden Las Mélidas.
De acuerdo con la activista ha habido retroceso respecto a la aprobación de las cuatro causales para despenalizar el aborto en el pleno legislativo, debido a una “actitud muy conservadora y fundamentalista”.
