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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Consideramos importante y acertado este ejercicio de transparencia gubernamental que los diputados y diputadas hacen al interpelar a la ministra de salud, Ana Orellana Bendek”, dijo Luis González, de la Alianza Nacional contra la Privatización del Agua, quien asistió a la primera etapa de la interpelación o juicio político sobre la crisis del agua, que afectó a la población en el Área Metropolitana de San Salvador (AMSS).
Las interpelaciones a la ministra de Salud, Ana Orellana Bendek y al presidente de la ANDA, Frederick Benítez, surgen luego que ambos funcionarios no asistieran a las citas previas hechas por diputados de la comisión de Salud y Medio Ambiente (28 enero) y Obras Públicas (20 y 27 enero), en su momento. “Nos parece acertado saber qué ocurrió con la crisis del agua, en enero pasado. Y es importante que la población conozca ¿si esto pudo afectar su salud?, ¿qué planificación tiene el Ejecutivo para enfrentar el tema del agua? y debemos decirlo se ha mermado la calidad del agua, su acceso también lo que le convierte en problema grave para el país”, sostuvo.
La ministra Orellana Bendek se presentó a la interpelación a las ocho con treinta minutos de la mañana del pasado sábado 15 de febrero, flanqueada por miembros de sus asesores, la comisionada presidencial, Carolina Recinos y por los ministros del Gabinete de Gobierno, de los cuales, solo el ministro de Trabajo se atrevió a calificar la interpelación como “show político”, a su paso en los corredores del Salón Azul, donde fueron apoyados por el partido GANA de la Asamblea Legislativa.
“Yo la he consumido y no ha habido ningún problema”, dijo la funcionaria ese sábado 18 de enero, cuando junto a la Comisión Nacional de Protección Civil aprobó el consumo del agua, luego de hervirla, pese a que las propiedad del agua es ser incolora, inodora e insípida. Así como, señalar que hubo incremento de casos en infecciones diarreicas, ni samonelosis en la semana 3, del registro epidemiológico, del presente año.
En cuanto a la crisis hídrica, González, agregó que aún existen problemas del agua en sectores populosos como Soyapango, Ilopango, San Martín, Apopa y Mejicanos, lo que violenta el derecho humano al agua de la ciudadanía.
“Las respuestas de la ministra (Orellana) fueron escuetas, sin duda el lenguaje técnico no contrasta con la realidad -es decir- todos y todas fuimos testigos que el agua tenía olor y sabor amargo, que tenía turbidez y era imposible que ella dijera que se podía consumir con solo hervirla. Y con los muestreos (laboratorio) que ellos dicen que hacen en varios lugares, que no pasa de cien puntos, pero no es la generalidad y no tienen la capacidad de estar en todos los lugares, entonces puede ocurrir que en donde tomaron la muestra, los parámetros sean los adecuados, pero en otros lados no”, explicó.
Mientras, Marielos Deleón, de la UNTS consideró que el emplazamiento de los funcionarios es adecuada, porque se trata de responsabilidades de Estado frente a la ciudadanía. Aunque, lamentó que la titular de salud, lejos de aclarar los cuestionamientos, buscó justificar la demora y parcialidad de la atención en la crisis del agua en el Área Metropolitana de San Salvador.
“Sabemos que algunos lugares de San Salvador, el agua sigue cayendo sucia y con mal olor, ojalá que alguien le trajera un vaso con esa agua y que ella propiamente la tomara en esas condiciones. Nos parece una falta de responsabilidad como funcionaria, y nos molesta que le eche las culpas a elementos técnicos con el fin de confundir a la población, y no es justo. No estamos pidiendo solo agua con calidad de potabilidad, sino también, la necesaria para vivir, espero que las preguntas que se hagan este lunes, puedan responder con responsabilidad”, alegó.
