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Niña Cristi, es encargada de la granja de pollos en el Centro Penintenciario Izalco. Foto Diario Co Latino/Wilfredo Lara

“Mi mente está ocupada en el trabajo, no pensando en cosas malas”: Privada de libertad

@JoakinSalazar

Una gota de sudor recorre su rostro, store como producto de su esfuerzo y trabajo que desarrolla.  Ya puntualiza las nueve de la mañana, cuando “Niña Cristi”, como la reconocen sus compañeras, ha realizado las principales labores que consiste en atender una pequeña galera con cien pollos y la limpieza de un papayero.

Su vida parece que se detuvo durante ocho años,  cuando una mala decisión la llevó hasta el Centro Penitenciario de Mujeres de Ilopango.  Niña Cristi ingresó hace dos años a la Granja Penitenciaria de Izalco,  donde junto a otras 287 privadas de libertad realizan labores en diferentes áreas.

Su día inicia a las seis de la mañana, cuando lo primero en realizar es transportar agua desde una distancia de cien metros, además de colocar la comida a los pollos que cuida.

“Me siento bien, no se siente el tiempo, porque me siento ocupada en mi trabajo, cuando vengo a sentir ya es tarde”, comenta la Niña Cristi en repetidas ocasiones de sus labor

Esta mañana, el vicepresidente de la República, Oscar Ortiz;  el Ministro de Justicia y Seguridad Pública, Benito Lara, acompañados del gabinete de seguridad y funcionarios de gobierno, colocaron la primera piedra del proyecto  Readecuación de Granja Penitenciaria de Izalco, con el que se amplía la granja para albergar a un mil mujeres recluidas.

Este proyecto permitirá ampliar las instalaciones del la Granja con nuevas instalaciones que permitirá reducir el hacinamiento carcelario de mujeres que por hoy oscila en más de tres mil privadas de libertad. La Directora de la Granja Penitenciaria y del Penal de Ilopango, Morena Mejía, detalló que este proyecto la dirección de Centros Penales pretende cumplir con el papel constitucional de crear un hábito laboral de las privadas de libertad.

“Aquí, en esta granja han tenido la oportunidad de aprender a cultivar, maíz, frijoles, pepinos, rábanos, papayas, ajonjolí, que les sirve como una herramienta cuando ellas adquieren su libertad, devolviéndolas a las sociedad como una personas readaptadas y socializadas listas para vivir en comunidad”, comentó.

 Con 37 manzanas de terreno, la Granja penitenciaria ofrece una segunda oportunidad a las personas recluidas, en Izalco, el terreno utilizado por el momento es poco, pero donde se produce mucho con cada sembradío.

“Marta” es una de las mujeres jóvenes quien es beneficiaria del Modelo de Gestión Yo Cambio, donde las privadas de libertad buscan garantizar cambios al obtener una segunda oportunidad  en sus vidas. Ella, junto a sus compañeras inician su jornada de trabajo en los sembradíos de ajonjolí, producto que se comercializa por la dirección de penales.

Reas de penal de Izalco realizan trabajos de agricultura en la granja penal.  Foto Diario Co Latino/Wilfredo Lara
Reas de penal de Izalco realizan trabajos de agricultura en la granja penal. Foto Diario Co Latino/Wilfredo Lara

 “Con todos los proyectos de la Granja Penitenciaria, he aprendido,  todo me va a servir, sobre todo, porque como ex privada de libertad no vamos a encontrar un trabajo fácilmente, y ya con lo aprendido uno resuelve aunque sea en el campo”, explicó Marta.

Y es que con la Granja Penitenciaria, las privadas de libertad aprenden diferentes oficios con los diversos sembradíos, los cuales se ampliarían con el proyecto que inicia desde hoy.

La Directora Mejía recalcó que tanto Marta, como Niña Cristi serán guías de las nuevas privadas de libertad que lleguen a la Granja, puesto que ofrecerán lo aprendido a otros que no saben, tal como es la filosofía del “Yo Cambio”.

“Con el nuevo modelo de gestión penitenciario, Yo cambio, aquí todas las privadas de libertad están involucradas en todas las actividades culturales, religiosas, aquí todo en la granja es una actividad constante en cuanto al cumplimiento de todos los programas”, comentó la Directora.

Según la dirección de Centros Penales, en las 37 manzanas de terreno se aplicarán proyectos como la crianza de tilapias, la implementación de casas mayas con cultivos, que son delicados.

Además, se ampliarán los sembradíos ya generados, como también se pretende la construcción de galeras para más producción de aves, donde la Niña Cristi aplicará lo aprendido con otras privadas de libertad.

“Con la ampliación que se pretende hacer, sería bueno porque es más trabajo, pero aún tengo que hacer, mi mente está ocupada en el trabajo, no pensando en cosas malas”, dijo la Niña Cristi.

Este proyecto se une  al proceso de construcción de Fase II y Fase III del Centro Penal de Izalco, los cuales ya presentan avances desde el reinicio del proyecto, meses atrás.

Los tres proyectos se unen para la creación del Complejo Penitenciario de Izalco, que reunirá más de cuatro mil privados de libertad, convirtiéndose en un sistema penitenciario moderno.

La Fase II y III se prevé que sean entregadas en unos seis meses, mientras que la Granja Penitenciaria para el sector femenino sería entregada en unos siete meses.

“Todo este trabajo se realiza para que los privados de libertad se incorporen a la sociedad, pero  sobre todo, con lo que han aprendido no vuelvan a delinquir”, puntualizó la Directora Mejía.

Estas iniciativas forman parte del trabajo integrado por el Director de Centros Penales, Rodil Hernández, con el impulso del Ministro de Justicia y Seguridad, Benito Lara, quienes desde el año 2014 han impulsado un nuevo modelo de gestión penitenciaria.

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