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Rebeca Henríquez
@RebeHenriquez
La Fundación Suiza de Cooperación para el Desarrollo Técnico (Swisscontact), junto al Grupo de Monitoreo Independiente de El Salvador (GMIES), en alianza con el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP), y bajo el financiamiento de la Unión Europea, llevó a cabo el evento “Juntos creamos un sistema de migración y retorno-Feria del Sistema de Reintegración productiva de migrantes retornados”.
Swisscontact promovió, a través del proyecto de Gene-Sis, y con la articulación de instituciones del sector público y privado, los servicios de más de 30 organizaciones de forma “vivencial y transparente” a población de personas de migrantes retornadas, a fin de validar y certificar las habilidades, competencias y experiencia que las personas retornadas adquirieron mientras trabajaban en el exterior.
“No solo nos consolidamos en una certificación y capacitación, sino que (el programa) es más integral, donde viene la parte de social, de migración y la parte de derechos humanos. La feria es la puerta que estamos abriendo, y aquí pueden tener una oportunidad para que ellos digan –aquí estamos y somos necesarios-”, destacó Ricardo Fernández, director país de Swisscontact.
Según Fernández, lo complejo para las personas retornadas es demostrar las competencias y actitudes que tienen luego de trabajar fuera del país, y el estigma que existe de que las personas no están habilitadas para el trabajo local, debido a ello, el proyecto Gene-Sis, que, a través de la certificación o capacitaciones, ayuda a las personas a la autosuperación con un documento que respalde sus conocimientos.
A través del apoyo de más de 30 aliados, entre los que destacan INSAFORP, ministerios, universidades, alcaldías, y otras entidades, Swisscontact generó un acercamiento a las microempresas de personas retornadas para generar nuevas oportunidades de trabajo y para que su negocio tenga mayor visibilidad dentro del mercado salvadoreño.
Para participar en el programa una persona migrante retornada debe tener el siguiente perfil: haber trabajado al menos dos años en Estados Unidos o México, persona entre los 18 a 50 años, género masculino y femenino, con experiencia laboral en el sector de construcción o turismo, documentos migratorios que comprueben que vivió en el exterior, documentos que evidencien su experiencia en el exterior, y actitudes de trabajo en equipo, colaboración, entre otras.
“El objetivo es certificar las competencias laborales de la población migrante retornada, para su inserción productiva en el país. A la fecha, hemos certificado a 464 persona retornadas con una inversión aproximada de $47 mil dólares, por parte de INSAFORP”, mencionó el presidente de INSAFORP, Ricardo Montenegro, e hizo énfasis en que existe un proceso de evaluación y certificación de competencias laborales.
Salvador Durán, creador de la marca “Salsa Rica”, relató que aprendió en Estados Unidos a preparar diferentes salsas mexicanas y con base a ello tuvo el sueño de hacer un producto propio, pero no fue hasta que regresó al país cuando pudo materializar sus ideas.
El emprendedor caracterizó su producto como una fusión de los conocimientos que adquirió en el exterior, junto a una mezcla de los sabores del país, mismo que concretó con la ayuda de la Universidad Tecnológica de El Salvador (aliada de Swisscontact), ya que a través de ella ganó un premio como capital semilla para llevar a cabo su marca.
