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Redacción Nacionales
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Este domingo se llevó a cabo la tradicional misa en la cripta de Catedral metropolitana, el padre Alberto Chávez, vicario de Catedral la presidió, y dio gracias a Dios por la misericordia que les ha derramado a los creyentes. El evangelio se trató de la absolutización de la riqueza, en que se debe solidarizarse con los que menos tienen.
“Hay que dar pasos en compartir los bienes para todos”, destacó el religioso. Ese llamado también lo hizo monseñor Óscar Arnulfo Romero durante su vida terrenal.
Romero, en 1979 se sorprendió que la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) no mencionara que la fuente de la pobreza fuera la absolutización de la riqueza y que hay que dar pasos en compartir los bienes para todos. En ese sentido, los religiosos en la cripta este domingo, presentaron una canasta de víveres simbolizando que la comunidad no absolutiza, sino que comparte sus alimentos con quienes sufren mayores carencias.
Alberto Chávez destacó que los ricos suelen ejercer sus ideas para generarles más riquezas dejando a un lado al pobre, aquel que no tiene las mismas oportunidades. Por ello, instó a que las riquezas se deben compartir con aquellos que no las tienen, ya que así lo mandata el reunió de Dios.
En otro punto, el religioso afirmó que el Salmo dice que la ley del señor es perfecta, verdadera y justa, así también monseñor Romero afirmó que la ley pierde autoridad moral cuando restringe lo que incumbe en ella: por ello, los católicos presentaron la frase “El Agua un Derecho de Dios”, simbolizando su vital creación, así como la exigencia de una ley moralmente justa y perfecta que proteja al agua por ser un derecho humano. Así también que este vital líquido sea consumido por aquellos que más lo necesitan.
Esto surge en el marco de la discusión que se está llevando a cabo en la Asamblea Legislativa por la aprobación de la Ley de Recursos Hídricos, que incluso la misma iglesia católica ha participado, dando sus observaciones y propuestas; también instaron que se garantice el alcance del agua a las comunidades más pobres.
Siempre en la procesión de ofrendas de la liturgia eucaristía, los feligreses presentaron a la Virgen de la Merced, patrona de los reos, ya que el 24 de septiembre fue su día, con ello, monseñor Romero aseguró que ella está presente en el sufrimiento y las crueldades de las cárceles para dar consuelo, por ello la presentación simboliza su consuelo e intercesión para que los prisioneros inocentes, obtengan justicia y una digna y efectiva rehabilitación.
