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El Cairo / Prensa Latina
Nicholas Valdes
La trigésima Cumbre de la Liga Árabe (LA) concluyó en Túnez con un llamado del bloque regional a que se detengan las acciones injerencistas en la región por parte de Israel y Estados Unidos.
‘La liberación de todos los territorios árabes ocupados es la única forma de resolver el conflicto árabe-israelí’, señaló el presidente de Egipto, Abdel-Fattah El-Sisi, en su discurso durante la sesión de apertura del cónclave.
El mandatario subrayó que Egipto, junto con los países árabes, rechaza la reciente decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer la soberanía israelí sobre los Altos del Golán sirios ocupados.
También se opone a la decisión anterior de Trump, de trasladar la embajada norteamericana en Israel de Tel-Aviv a Jerusalén; una posición que fue secundada por 22 Estados miembros de la liga.
Reafirmó el derecho del pueblo palestino a establecer su Estado independiente con Jerusalén Este como su capital, y dijo que los Altos del Golán ocupados por Israel deben ser devueltos a Siria para trabajar por una paz amplia y justa.
Los líderes árabes rechazaron el reconocimiento de Estados Unidos al control israelí sobre los Altos del Golán sirios y otras políticas de la administración de Trump, las cuales calificaron como sesgadas hacia Israel.
Reiteraron igualmente su compromiso de resolver el conflicto basado en la Iniciativa de Paz Árabe de 2002, en la cual reconocerían a Israel a cambio de un retiro completo de los Altos del Golán, así como de Jerusalén oriental y Cisjordania, tierras palestinas ocupadas tras la guerra de 1967.
‘Arabia Saudita rechaza absolutamente cualquier medida que socave la soberanía de Siria sobre los Altos del Golán y apoya la creación de un Estado palestino en Cisjordania y la Franja de Gaza, con Jerusalén oriental como su capital’, dijo al respecto el rey Mohamed Bin Salman.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, António Guterres, también asistió a la cita, el 31 de marzo, junto con la jefa de política exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini, y el presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki.
Guterres reiteró en la cumbre de Túnez el apoyo internacional a un Estado israelí que viva lado a lado y en paz con el Estado palestino, dentro de fronteras seguras y reconocidas: ‘No hay un plan B. Sin dos Estados, no hay otra solución’, dijo.
La comunidad internacional, incluido Estados Unidos, estaba de acuerdo con la idea de que Jerusalén Este fuera la capital de un futuro Estado palestino.
Sin embargo, el año pasado Trump decidió abandonar dicha política y trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén, y a principios de marzo último reconoció la anexión de Israel de la meseta del Golán.
El presidente libanés, Michel Aoun, dijo por su parte que esa decisión de la Casa Blanca no amenaza solamente la soberanía de Siria, sino también la de Líbano.
‘Hay territorios libaneses como las Fincas Sheba, los Altos Kefr Shuba, o el norte de Al-Gacer que Israel ocupa fase por fase. No obstante, está documentado en mapas aceptados a nivel internacional que esos territorios pertenecen a Líbano’, expresó el mandatario.
Durante su intervención, Aoun se cuestionó qué será de la garantía de países pequeños como Líbano cuando se violan la legitimidad y los documentos internacionales: ‘Si ya es difícil superar este tipo de proyectos cuando actuamos juntos, ¿cómo lo vamos a superar si estamos separados como ahora es el caso?’, advirtió.
El presidente libanés también hizo mención al tema de Palestina y destacó que con la Ley del Estado de Nación Judía, aprobada el pasado año, Israel intenta privar definitivamente a los palestinos de sus tierras.
Sobre ese particular, El-Sisi dijo que la persistencia de la injusticia histórica contra el pueblo palestino continuará siendo una fuente de desgracia para la comunidad internacional, siempre que se ignoren las resoluciones de legitimidad establecidas.
Los países árabes han elegido la paz y presentaron una iniciativa de paz integral a cambio de la liberación de todos los territorios árabes ocupados y la implementación de resoluciones de legitimidad internacional, afirmó el jefe de Estado egipcio.
Tras el cierre de la reunión, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) agradeció el apoyo árabe a Palestina, en particular la activación de la red de seguridad financiera.
La miembro del Comité Ejecutivo de la OLP, Hanan Ashrawi, dijo en un comunicado desde Ramallah que esa iniciativa ayudará a que Palestina supere el chantaje político y financiero de Estados Unidos e Israel.
El liderazgo palestino agradece la activación de la red de seguridad financiera por parte de la Liga Árabe para ayudar a superar las debilitantes presiones financieras causadas por la piratería ilegal de los impuestos fiscales palestinos por parte de Israel, declaró Ashrawi.
La dirigente de la OLP también destacó el rechazo del bloque regional a las acciones ilegales de Israel en relación con el régimen de asentamientos ilegales.
Valoramos mucho igualmente la posición árabe unánime que rechaza las políticas ilegales de la Administración estadounidense de Donald Trump con respecto a la ocupada Jerusalén y los Altos del Golán sirios, añadió Ashrawi.
Reiteramos que la paz no puede separarse del respeto a la ley y la realización de la justicia, que requieren una responsabilidad activa. Este principio debe seguir siendo universal, y la comunidad internacional tiene la responsabilidad de confrontar a los que intentan socavar estos fundamentos, concluyó la funcionaria.
La trigésima cumbre de la Liga Árabe, titulada ‘Uniendo Visión y la Palabra’, abordó los principales problemas que aquejan a la región; no solo el conflicto palestino-israelí, sino también las actuales y difíciles situaciones de inestabilidad en Siria y Libia.
