Saúl Méndez
Colaborador
Este domingo, la Comunidad Romeriana rememoró en la cripta de la Catedral Metropolitana de San Salvador la homilía que Monseñor Óscar Arnulfo Romero pronunciada el 3 de julio de 1977, correspondiente al decimocuarto domingo del Tiempo Ordinario.
Durante el acto, los asistentes recordaron el mensaje de Romero, centrado en el anhelo de paz y la fuerza transformadora de la palabra de Dios. En aquella homilía, el entonces arzobispo se inspiró en las lecturas de Isaías 66, 10-14a; Gálatas 6, 14-18; y Lucas 10, 1-12.17-20.
“Queridos hermanos y, a través de la radio, estimado pueblo que reflexiona sobre la palabra de Dios, que debe ser siempre la inspiración y fortaleza del verdadero seguidor de Jesucristo”, expresó Monseñor Romero en esa ocasión. Los feligreces recuerdan que cada domingo la liturgia ofrece un mensaje renovado para guiar al pueblo en el camino de la fe y la justicia.
Romero destacó en su homilía el llamado a la paz a través de las palabras de Isaías: “Me alegro mucho de proclamar esta palabra de Isaías porque es la lectura que la liturgia también aplica a la misa de Nuestra Señora de la Paz, patrona de todo El Salvador. Y la invoco hoy (…) porque ella dará a mi palabra y a vuestra inteligencia la capacidad de captar eso que se encarnó en ella, la Reina de la Paz”, afirmó.
El momento de la homilía fue un espacio de reflexión sobre el legado espiritual y social de Romero, cuya voz sigue resonando en la búsqueda de la paz y la justicia en El Salvador.
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