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Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
La Asamblea Legislativa aprobó esta noche con 66 votos a favor la Ley Especial para la Reestructuración Municipal con la cual se reduce el número de municipios de 262 a 44. Diputados de oposición comentaron que esta ley es estrictamente electoral.
En el dictamen se mencionó que la ley «surge de la imperiosa e impostergable necesidad de reorganizar la estructura municipal del Estado» a través de la reducción de municipios de cada uno de los catorce departamentos, que en su mayoría se convertirán en distritos y serán parte de 44 municipios que poseen una infraestructura económica, tributaria y administrativa «más robusta».
El dictamen de la Comisión Política comentó que lo anterior, es con el fin de coadyuvar en su crecimiento, «respetando la identidad histórica, socio-humana, y las tradiciones culturales, sociales y religiosas de los que ahora pasarán a ser distritos, así como todas aquellas características propias de cada región que permitan que todas las personas que habitan en dichos territorios, continúen conservando su propia identidad religiosa, social, comunitaria y sus usos y costumbres».
La diputada de ARENA, Rosy Romero, sostuvo que la ley se efectúa con los insumos del censo de 2007, datos que, «lógicamente, ya no están actualizados». Romero recordó que el año pasado se aprobaron aproximadamente $44 millones para hacer un censo. «Días después, disolvieron a la institución que lo realizaría (la DIGESTYC) … ¿dónde está el dinero?», cuestionó la opositora.
Sobre el mismo tema, el diputado de Nuestro Tiempo Johnny Wrigth Sol lo consideró como «irresponsable» al usar datos del 2007 para tomar «esta decisión tan importante en junio de 2023».
«Es claro que un censo del 2007 no es un reflejo actual de la población en el 2023 y este nuevo reordenamiento es antojadizo», sostuvo Sol.
La diputada de Nuevas Ideas, Suecy Callejas, sostuvo que «la reestructuración municipal se hizo respetando la identidad histórica, tradiciones culturales, sociales y religiosas de los actuales municipios».
«Los municipios actuales no desaparecen, sino que pasan a llamarse distritos. Los beneficios son que se reduce la carga presupuestaria y se distribuyen equitativamente los impuestos», agregó Callejas.
