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Gloria Orellana
@DiarioCoLatino
“Venimos de distintos lugares de El Salvador, y estamos uniendo esfuerzos para que se reconozca a la persona defensora de los derechos humanos, en este momento el país vive una situación crítica de país, de democracia, que ha generado un retroceso”, dijo, Néstor Urquilla, de la Asociación de Afrodescendientes de El Salvador.
En el marco de la conmemoración del Día Nacional de la persona defensora de derechos humanos, por decreto legislativo aprobado en el año 2013 por la Asamblea Legislativa. Diversas organizaciones, comités, colectivos y personas defensoras de derechos humanos se pronunciaron, ante lo que consideran una situación de extrema vulnerabilidad, que socava algunos logros desde la firma de los Acuerdos de Paz, en enero de 1992.
“Se ha hecho una vulneración a la institucionalidad del país, lesionando la independencia de los órganos del Estado, que no se están respetando, sino que desde el Ejecutivo se están tomando las decisiones de país. Ya el órgano Judicial no es independiente, ni el Legislativo, todos le responden al presidente Nayib Bukele”, afirmó Urquilla.
A estos “entornos críticos” como señalaron los diversos colectivos se suman leyes y medidas que lindan con la “ilegalidad”, al señalar la violación a la libertad de movilización de las marchas opositoras a las políticas del actual gobierno, así también, la libertad de expresión y el derecho de información.
“Hacemos un llamado no solo a las fuerzas nacionales, la diáspora y los organismos internacionales de derechos humanos, para que se interesen realmente de lo que ocurre en el país, que es grave”, agregan las organizaciones.
“Un ejemplo, ayer consulté en la plataforma de Chivowallet, los datos de mi DUI, ya fue utilizado y sacaron los 30 dólares que dio el gobierno. En ningún momento he bajado esa aplicación y creo que esto solo se presta a una malversación de información y dinero. Son 21 mil bitocoins que circulan a nivel de país y ese dinero virtual está sujeto a la manipulación corrupta”, señala.
Sobre el país y su histórica y cíclica violación a los derechos humanos, también fue retomado por personas defensoras emblemáticas como Anastasio Aquino y el levantamiento indígena, derechos de las mujeres y Prudencia Ayala.
La Iglesia Católica, San Oscar Romero y Padre Rutilio Grande, así como, otros líderes estudiantiles, sindicales y personas de la sociedad civil, que han defendido los derechos de la población a través de los años, y que los diferentes gobiernos no han reconocido esta labor porque contradice su línea oficial de gobernanza, señala el pronunciamiento.
Sobre el Cuarto Encuentro Nacional de Defensores y Defensoras, las organizaciones abordaron diversas temáticas, así también el de fortalecer las capacidades de cada una para realizar una efectiva operatividad o denuncia de violaciones a derechos fundamentales de la población, explicó Andrés Miranda, de Tutela Legal “Dra. María Julia Hernández”.
“Queremos fortalecer la articulación entre organizaciones de la zona Oriente y Occidente del país, porque existe un grave retroceso que es evidente y muy grave, más que todo en la labor de las personas que defienden derechos humanos y las poblaciones vulnerables”, agregó Miranda.
“Esto más que un retroceso democrático, es un atropello a derechos fundamentales de la población y de las personas defensoras que a lo largo de una lucha social se lograron conquistar. Nosotros no somos oposición, estamos abiertos al diálogo y esperamos que el Gobierno nos escuche en nuestras demandas”, acotó Miranda.
Ante esta situación, las organizaciones, redes y comités de derechos humanos demandaron al Gobierno, y, en especial al presidente Nayib Bukele, el respeto y protección de las personas defensoras de derechos humanos, dejando el discurso de odio y confrontación, para construir una cultura de paz.
Asimismo, a la Asamblea Legislativa, para que saque del archivo el antreproyecto de Ley para el Reconocimiento y Protección Integral de las Personas Defensoras de Derechos Humanos para la Promoción y Garantía del Derecho a Defender Derechos, para ser aprobada como normativa nacional.
“Hago un llamado al presidente de la república, Nayib Bukele, que fomente realmente una cultura de paz, porque lo que tenemos hasta ahora, es una situación de intolerancia que va creciendo y eso va en detrimento de los derechos humanos de toda la población”, agregó.
“Y queremos que se reconozca nuestra labor como defensores y defensoras de Derechos Humanos, porque somos ciudadanos que respondemos a una demanda social, cuando se han vulnerados algunos derechos que el Estado debe asumir, pero no lo ha hecho.
Por eso estamos aquí, porque formamos parte de la historia de este país y no podemos ser invisibilizados solo como una medida para no escucharnos”, puntualizó, Franciso Ortiz, de FUNDASIDA.
