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José Gabriel Martínez
MANAGUA/Xinhua
El alivio de la pobreza y el bienestar del pueblo son objetivos comunes entre China y Nicaragua, que favorecen el acercamiento y la cooperación bilateral tras el restablecimiento de relaciones diplomáticas, afirmó el presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes.
El funcionario ponderó en entrevista con Xinhua la atención que presta el gobierno de China al bienestar del pueblo chino y a la mejoría del bienestar global, al considerar que ese es un gran objetivo compartido por Nicaragua que podrá contribuir a profundizar las relaciones.
«Todos los indicadores económicos de nuestro país están apuntando hacia una mejoría gradual del bienestar de las familias», dijo Reyes, quien identificó áreas y prioridades socioeconómicas del gobierno nicaragüense que lo hacen converger con algunos de «los grandes objetivos que se ha trazado China».
Entre estas áreas y prioridades mencionó el acceso a la salud y la educación, así como a servicios básicos como luz y agua potable, además de vivienda digna y bienes de consumo necesarios para la vida cotidiana.
Citó los esfuerzos por aliviar la pobreza, tarea en que ve a China como ejemplo relevante de experiencias y conocimientos que puede aportar a Nicaragua, por la erradicación de la pobreza extrema que este año logró el país asiático.
«Alcanzar la reducción de la pobreza extrema sería un gran paso para nuestro país. Ahí es donde la cooperación puede generar frutos», dijo.
En opinión del entrevistado, tras el restablecimiento de relaciones diplomáticas, Nicaragua buscará aprovechar mejor las iniciativas de China para reducir la pobreza y ayudar al crecimiento económico global.
Entre ellas mencionó la Iniciativa de la Franja y la Ruta, muestra del «liderazgo de la economía china en la expansión del comercio mundial para beneficio de todos».
Por su localización regional, Nicaragua podría contribuir junto a China a que no se produzcan en el área centroamericana o a que no escalen disrupciones en las cadenas de suministro, como las que se han observado este año y que han impactado negativamente en la economía global, según la exposición de Reyes.
Resaltó en tal sentido que el país centroamericano ofrece como principal atractivo el hecho de que está en el centro del continente americano.
«Estar en nuestro país da acceso a los dos océanos y eso es una gran ventaja que sirve de puente para el resto de las naciones», afirmó.
Reyes ve en su país grandes oportunidades para inversores de China y notorias potencialidades para un comercio bilateral mutuamente beneficioso, a pesar de la evidente diferencia en los mercados de los dos países, en lo que a extensión y proporciones se refiere.
«Nicaragua puede aprovechar mucho la ventaja de tener un mercado de gran escala para sus exportaciones, ya que la producción nicaragüense puede ser fácilmente localizada», comentó.
«Estoy convencido de que Nicaragua y los inversionistas chinos pueden encontrar acá puntos de inversión que puedan facilitar ese comercio», agregó.
El presidente del Banco Central de Nicaragua habló de los rubros que su país puede exportar a China en mayores volúmenes que los actuales, gracias a la nueva etapa que se abre tras el restablecimiento de relaciones.
Entre ellos mencionó productos primarios como carne vacuna, café y azúcar, además de una gama de productos que podrían ser atractivos y que tienen que ver con la producción semi industrial y agroindustrial que existe en el país, así como nuevas fuentes que podrían encontrarse «dependiendo de la demanda existente en China».
«Creemos que el restablecimiento ahora de relaciones diplomáticas y comerciales va a ser un factor de empuje para que las exportaciones se dinamicen, así también las importaciones», dijo Reyes.
Nicaragua realiza importaciones con valor superior a los 1.000 millones de dólares desde China y sus exportaciones actuales son pequeñas.
El funcionario expuso a Xinhua los nichos de inversión que identifica para una cooperación dirigida al logro de los objetivos socioeconómicos que comparten ambos países.
Entre estos nichos mencionó el desarrollo y la ampliación de puertos, así como de rutas de tránsito aéreo y zonas francas, además del sector inmobiliario, transporte y turismo.
Consideró que todo el potencial que hay para la cooperación bilateral puede ser complementado también por intercambios personales y especializados en las esferas económica, financiera y de toda índole.
