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William Siliézar
@DiarioCoLatino
Sin importar lo soleado y caliente de las calles, organizaciones sociales marcharon hacia la Embajada de Estados Unidos para exigirle a la representante de ese país que no intervenga en los problemas nacionales, y de igual manera, que deje de favorecer a las minorías.
Las exigencias las hicieron en el marco de la celebración de ALBA, cada 5 de noviembre y que los presidentes Néstor Kirchner de Argentina, Lula da Silva de Brasil y Hugo Chávez de Venezuela impulsaron para lograr una transformación política y social en América Latina, asimismo como independencia del imperio.
Wilfredo Berríos, del Frente Social y Sindical Salvadoreño (FSSS), aseguró que la embajadora de Estados Unidos Janes Manes “busca derrumbar los gobiernos progresistas como el de El Salvador,
Ecuador, Bolivia, Argentina y Venezuela.
Según Berríos, la nación norteamericana quiere recuperar la “hegemonía del capitalismo” en Latinoamérica. Sin embargo, aseguró que en El Salvador no permitirán que esto suceda.
El manifestante sostuvo que el Gobierno de El Salvador está llevando a cabo diferentes programas sociales a favor de los menos desfavorecidos como el vaso de leche, los paquetes agrícolas y escolares, hospitales nuevos y otros, por tanto, pidió a Janes Manes que “respete la soberanía nacional”.
Carolina Rivas, de la Coordinadora Intergremial Rafael Aguiñada Carranza (CIRAC), señaló que la representante de Estados Unidos trata de “imponer” su agenda para seguir favoreciendo a los grupos
opositores del país.
Sin embargo, Manes ha reiterado en diferente ocasiones que el diálogo entre las principales fuerzas políticas es fundamental para solucionar los problemas que enfrenta El Salvador. Ante esto, Rivas
consideró que los planteamientos de la embajadora “tienen doble cara”.
“La diplomacia se maneja de esa manera, pero es un doble discurso el que la señora embajadora tiene, estamos claro que las intenciones de ella no son buscar el diálogo ni la paz, sino proponer y meter su
agenda. Ellos están con un discurso anti corrupción pero ellos mismos son quienes asolapan a los areneros”, manifestó.
La opinión de Rivas es compartida por Mariela De León, de la Comisión Nacional por un País sin Hambre y Seguro (CONPHAS), que aseguró que el diálogo sí es importante, no obstante, este debe ser entre el pueblo salvadoreño sin intervención de otros actores.
Por otra parte, Berríos del FSSS, aseguró que la propuesta del partido ARENA de aprobar sólo $500 millones de dólares es otra de las acciones que están tomando los grupos opositores para “a cuenta gotas estrangular” al Gobierno de Salvador Sánchez Cerén.
