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Miembros de la Mesa por la Sustentabilidad de los Territorios de Sonsonate demandan respeto al veto emitido por el Presidente Salvador Sánchez Cerén que ampara al sitio arqueológico Tacuscalco. Foto Diario Co Latino/Archivo.

Movimiento social demanda respeto al veto presidencial sobre Tacuscalco

Gloria Silvia Orellana
@SilviaCoLatino

Salvador Recinos, de la Mesa por la Sustentabilidad de los Territorios de Sonsonate, reiteró el compromiso de las organizaciones sociales y ambientalistas en su lucha contra la construcción urbanística de la empresa Fénix en el sitio sagrado de Tacuscalco y en el respeto del veto emitido por el Presidente Salvador Sánchez, que ampara el sitio arqueológico.

Es un terraplén de varias manzanas en Nahuilingo, Sonsonate, yace un sitio arqueológico que según informes del Ministerio de Cultura (MICULTURA) es una de las más importantes heredades patrimoniales que datan del 1500 a. C. hasta el 1524 d. C. y que por tal motivo fue declarado en 1997 “Bien Cultural”.

“Con esto se pone en riesgo el patrimonio cultural y ambientalmente se pone en riesgo al río Ceniza (que circunda el proyecto urbanístico para liberar aguas grises) ante la insistencia y sectores políticos. Es por esto que ahora queremos dejar claro ante la opinión pública nacional e internacional que se encuentran trabajando en una propuesta técnica de gestión y valorización del sitio sagrado”, dijo Recinos.

Asimismo, felicitaron al Presidente de la República Salvador Sánchez Cerén por su veto presidencial ante el decreto legislativo que pretendía hacer pasar una interpretación auténtica al inciso 2, del artículo 8, que aborda la protección del patrimonio cultural en el territorio nacional. “En términos políticos es muy significativo el veto presidencial, que reconoce todos los esfuerzos del movimiento social, organizaciones indígenas y comunidades de Nahuilingo y alrededores, que hemos realizado esos esfuerzos en defensa del patrimonio cultural depositado en Tacuscalco y la protección del río Ceniza”, reafirmó.

Sonia Gutiérrez de ARUMES señaló que el sistema judicial debe trabajar con ética y reconocer la injusticia que se comete en Tacuscalco, al despojar de la herencia cultural no solo a las personas que viven en los contornos sino también en la violación del derecho a la identidad de los pueblos indígenas del país.

“Nosotros estamos presentes para seguir esta lucha por el sitio arqueológico y por el agua, porque sin ella no podemos vivir e invitamos a todas las instancias de Gobierno a cooperar por la protección de estos sitios que para nosotros son sagrados y son nuestra identidad ancestral”, concluyó.

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