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Los transportistas de la ciudad de Panamá Oeste mantuvieron el paro de sus servicios por segundo día consecutivo, donde se destaca el cierre de vías como mecanismo de que el Ejecutivo atienda sus demandas.
La principal exigencia de los manifestantes es que el presidente de la República, Laurentino Cortizo, acceda a una reunión con el sector para lograr una regulación del diésel y la gasolina.
Al mismo tiempo, exigen la discusión de la Ley 808 que implica la suspensión transitoria en el cobro y recaudación del impuesto de consumo del combustible y derivados del petróleo.
Asimismo, los manifestantes solicitan al Gobierno, además, la congelación de los precios del combustible y la revisión de las tarifas de los pasajeros, mantenida por los últimos 11 años.
Por su parte, el presidente de la Cámara Provincial de Transporte de Panamá Oeste, expresó que la huelga será por tiempo indefinido y que “la solución no está en la Dirección de Tránsito”.
El sector quiere “hablar directamente con el presidente o con una alta comisión para resolver la problemática de los transportistas”, declaró.
En tanto, la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT),explicó que están abiertos al diálogo y que el alza del pasaje no puede ser un tema a conveniar.
El paro, al que se unieron también los territorios de Chiriquí, Darién y la caribeña Colón, también pretende llamar la atención del viceministro de Comercio Interior, Omar Montilla para que negocie con los proestasntes en la zona.
La manifestación obstruyó el paso de los vehículos tras el cierre de calles de la parte oeste como la vía y la carretera Interamericana.
Las autoridades ejecutivas debieron movilizar autobuses de la Fuerza Pública y de la empresa Mi Bus hacia las paradas que se encontraban abarrotadas, para poder transportar al personal hacia sus zonas de trabajo.
El pasado 11 de abril los trabajadores del sector también realizaron un paro de 24 horas, en contra del aumento acelerado de los precios del combustible que afectó a las provincias de Panamá y Panamá Oeste.
