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Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Mauricio Merino, Sacerdote de la Diócesis de San Vicente, aseguró que San Oscar Romero invitó al pueblo salvadoreño a ser transformador de la sociedad, a través del evangelio de Cristo.
La liturgia de este domingo, en la Cripta de Catedral Metropolitana, estuvo centrada en la visita de María, la madre de Cristo, a su prima Isabel, madre de Juan El Bautista.
Con esta lectura se abordó el misterio de la salvación, presentando a María como signo de la salvación y la portadora de la bendición de Dios. “Es ella la que acoge el regalo de Dios, y quien trasmite este regalo de Dios a la humanidad”, explicó el sacerdote.
Además, el padre hizo referencia a la homilía de Monseñor Romero del 23 de diciembre de 1979, donde San Romero plantea dos ideas principales: la primera a Jesucristo como la salvación de Dios, que está presente en medio de su pueblo. Y segundo a María como signo de esta salvación que continúa presente hasta hoy.
“La lectura que Monseñor Romero hace sobre los acontecimientos eclesiales del momento, él nos invita a ser transformadores de la realidad de que se vive.
El cristiano auténtico debe ser transformador de la sociedad, inspirado en los principios del evangelio.
Para el sacerdote, el pensamiento de Monseñor Romero es actual y continúa vigente. “Romero nos invita a estar atentos en esa lectura de la realidad, de identificar los grandes problemas que nos afecta. Como la inseguridad, injusticias en las instituciones de Gobierno, migración como efecto de la pobreza, esto exige y demanda de nosotros una respuesta y eso fue lo que nos pidió Romero”, agregó.
En cuanto a los problemas de la Iglesia, él sacerdote explicó que el primero es la división de la iglesia, el indiferentismo de la iglesia en los problemas sociales y los escándalos de carácter sexual que tiene la Iglesia.
“Esto nos demanda a responder desde el evangelio a todos estos problemas que hoy tenemos”, dijo.
