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Lima/Perú/AFP
Los Juegos Panamericanos fueron clausurados la noche del domingo y Estados Unidos Unidos se llevó las manos llenas del oro que se repartió en Lima 2019, Brasil se va con el segundo mayor cargamento y Perú, un gran anfitrión.
La cita multideportiva más importante antes de los Juegos Olímpicos de Tokio-2020 terminó sabiendo una vez más del poderío de los estadounidenses.
La superpotencia no permitió sorpresas. Son 18 ediciones y 16 bajo su dominio.
Las dos únicas excepciones fueron Buenos Aires-1951 y La Habana-1991. En Perú su ventaja absoluta en el medallero la marcó el oro cien que el sábado consiguió el equipo de relevo 4×400 metros femenino del atletismo.
La cosecha estadounidense de oros, duplica a la que lleva su escolta, Brasil, que con 54 doradas ya se aseguró el segundo lugar del medallero, algo que solo había logrado hace 56 años, en 1963, cuando fue anfitrión de los Juegos en Sao Paulo.
En las pistas obtuvieron siete oros contra seis de Brasil y seis de Jamaica. Y en las piscinas acapararon 21 de las 36 medallas doradas en disputa.
Y una de sus bazas fue Margo Geer, que se va de la capital peruana con cinco medallas, cuatro oros y una plata.
El gigante sudamericano desplazó a Canadá como escolta inmediato de los vencedores, lugar éste que había ocupado hace cuatro años como anfitrión en Toronto.
Es el mejor rendimiento para los brasileños desde 1963, cuando quedaron detrás de los estadounidenses en la fiesta que organizaron en Sao Paulo.
Brasil capturó 55 oros y aventaja por mucho a México. Con 37 metales de los más preciados, los aztecas apenas superaron por delante de los canadienses (34) y con Argentina (32) y Cuba (33) .
La nación sudamericana tuvo en la nadadora Delfina Pignatiello a una de las estrellas emergentes de los Juegos.
Con apenas 19 años, Pignatiello recolectó tres preseas doradas en los 400, 800 y 1.500 metros libre y fue una de las grandes protagonistas de la natación.
