Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
Marlon Chicas – El Tecleño Memorioso
De acuerdo con la ingeniera salvadoreña Marta Silvia Guzmán Deras, experta en alimentos, con referencia a la elaboración de dulces artesanales en El Salvador, estableció que, durante la conquista española al continente americano, se introdujo la plantación de caña de azúcar, lo que se convirtió en punto de inflexión para la elaboración de estas golosinas. siendo Cristóbal Colón, Hernán Cortez y Francisco Pizarro, los responsables de introducir el plantío de este en América de forma vertiginosa, superando en producción de caramelos al resto del mundo en menos de cien años.
En cuanto a lo anterior, la industria de la confitería en Santa Tecla, está ligada a la llegada de familias del interior del país a esta urbe, con el propósito de constituir empresas dedicadas a este rubro, para el caso de doña María Eugenia de Cornejo, originaria de San Pedro Nonualco, que en 1955 fundó la famosa y recordada dulcería “El Pilón”, sobre el final de la 12ª avenida sur.
Esta factoría se caracterizó en la elaboración de golosinas hechas a mano por diestros operarios quienes, a través de clavijas, paneaban el dulce de Pilón hasta lograr su consistencia, para luego cortarlo en pequeños carrizos y procesarlo en una máquina donde se obtenía la forma y color deseado, posteriormente empaquetarlo y distribuirlo a nivel nacional, lastimosamente este emporio cerró operaciones en 1986.
En 1875 nace en el departamento de Santa Ana una iniciativa de doña Juana Zavaleta de Vides de brindar talleres de cocina a las niñas de dicha localidad entre las que descolló doña Jesús Pérez Albanés, de acuerdo con datos históricos en casa de doña Juana Zavaleta, nunca se vendió un dulce, sino que se ideó regalarlos a los residentes de Santa Ana para que conocieran los dulces que ahí se elaboraban y la calidad de estos. Lo anterior daría paso a la creación de un gremio de dulcerías llamado “Dulcería La Santaneca”.
En 1919, se trasladan a Santa Tecla, donde abren su primera sala de venta, sobre la tercera calle oriente costado sur del Colegio Belén. Por su parte, doña Jesús Pérez Albanés transmitió sus conocimientos a su hija Rosa Bertila Albanés y posteriormente en 1942, se incorporó doña Rosa Morán.
En 1958 ingresó doña Julia Morán de Ábrego con el fin de mantener la tradición de la elaboración de dulces típicos artesanales, en 2006, inauguraron dos sucursales más con el fin de llevar las delicias de estos manjares a otros municipios.
Sin lugar a dudas Santa Tecla es rica en historia gastronómica en la fabricación de dulces artesanales.
Debe estar conectado para enviar un comentario.