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@JoakinSalazar
Clientes de red de trata de personas enfrentarán justicia. Pese a ser considerados testigos criteriados, bajo la administración del ex Fiscal General, Luis Martínez, hoy la Fiscalía General de la República ordenó la captura de Alejandro Maximiliano González, conocido como “El Gordo Max”, y el empresario Ernesto José Regalado, al ser acusados por el delito de remuneración por actos sexuales en menores de edad.
En este proceso también se vincula a otras dos personas, de las que la Fiscalía aún se reserva el nombre.
Entre diciembre de 2013 y agosto de 2014, más de 10 personas fueron arrestadas por el delito de trata de personas, en perjuicio de menores, al utilizar las redes sociales para explotar sexualmente a jóvenes, engañándolas a través de un supuesto empleo de modelaje.
En esa oportunidad, se hizo público un listado de supuestos clientes de dicha red, entre los que figuraba Max González y otros presentadores y empresarios salvadoreños, no obstante, nunca fueron perseguidos ni acusados por el ex fiscal general Luis Martínez.
Hace un par de años se hizo público el requerimiento presentado al Juzgado que llevó el caso, donde se narró la historia de una de las víctimas, principalmente vinculaba al “Gordo Max” en el hecho, por haber pagado para sostener relaciones sexuales con la menor. Por las menores los clientes pagaban entre $50 y $300 dólares.
Esta red de trata de personas y explotación sexual de menores operaba en los centros comerciales de la capital, y según se conoció en el proceso con clientes reconocidos, como empresarios y presentadores de televisión y radio. Pese a ello, las autoridades no actuaron en contra de dichos clientes, pese a que la lista se hizo pública.
De este caso, la Secretaria de Inclusión Social Vanda Pignato denunció que junto a los tratantes, la Fiscalía debía de actuar en contra de los “clientes”, puesto que también forman parte de la red de trata de personas y tienen culpabilidad de los hechos. La denuncia fue ignorada por la Fiscalía en su momento.
De acuerdo a la Fiscalía, las órdenes de captura ya fueron ejecutadas, sin embargo, aclaró que ha iniciado una investigación interna por no iniciar un proceso judicial en contra de los llamados “clientes” de la red de trata.
Y es que de acuerdo a la Fiscalía, el Gordo Max y el empresario Regalado fueron imputados en el proceso, pero, la Fiscalía les dio calidad de testigo por lo que nunca fue procesado. Hoy la Fiscalía los acusa por el delito de Remuneración de actos sexuales con menores de edad, que de ser hallado culpables podrían ostentar una pena de tres a ocho años de prisión.
