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@AlmaCoLatino
Por diez años la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), online cialis se ha convertido en un espacio de reencuentro entre los pueblos y gobiernos que asumen a América Latina y el Caribe como una Gran Nación, vinculada por lazos históricos que los impulsan a enfrentar conjuntamente los desafíos del presente y el futuro.
ALBA nace el 14 de diciembre de 2004, en La Habana, Cuba, mediante la suscripción de una declaración conjunta por parte de Hugo Chávez y Fidel Castro. Actualmente está integrada por 9 países: Antigua y Bermuda, Bolivia, Cuba, Dominicana, Ecuador, Nicaragua, Santa Lucía, San Vicente, Las Granadinas y Venezuela.
El ALBA-TCP es un elemento cohesionador y dinamizador para avanzar hacia el objetivo superior que constituye el sueño bolivariano de crear la unidad regional, se ha constituido en una alternativa a los esquemas de integración tradicional, un espacio de respuestas oportunas ante la crisis política, social, financiera, alimentaria, energética y de cambio climático.
La embajadora de Venezuela en El Salvador, Nora Uribe, expresó que ALBA surge en contraposición a la propuesta del Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA), que pretendía incrementar el poder y dominio del capital a través de las empresas trasnacionales, a expensas del sacrificio y explotación de la población y de los recursos naturales de la región, con notables consecuencias sociales como la precarización del empleo y el incremento de la pobreza.
Uribe recalcó que esta alianza es uno de los sueños hechos realidad del comandante Fidel Castro y del comandante Hugo Chávez, quienes pretendieron unir las capacidades y fortalezas de los países que la integran, en la perspectiva de producir las transformaciones estructurales y el sistema de relaciones necesarias para alcanzar el desarrollo integral requerido con el objetivo de continuar como naciones soberanas y justas. “ALBA se ha caracterizado por desarrollar políticas orientadas a saldar la deuda social con los pueblos, a través de proyectos sustentados en los principios de solidaridad, cooperación, complementariedad y respeto a la soberanía y autodeterminación, ya que su esencia y razón de ser es el desarrollo integral que asegure la eliminación de las desigualdades sociales y fomente la calidad de vida y una participación activa y efectiva de los pueblos”, expresó la diplomática.
Foto Diario
Co Latino/ Rodrigo Sura
Desde el ALBA-TCP se han desarrollado e impulsado planes de alfabetización, acceso a la salud y a la educación de carácter regional, atención a las personas con discapacidad, creación del fondo de emergencia social, desarrollo de las comunicaciones, una nueva plataforma económica fundamentada en la inversión social, integración energética, fomento de las inversiones de capitales de la región, concertación de posiciones en la esfera multilateral, defensa de la soberanía de Nuestra América, de los derechos de la Madre Tierra, de la cultura y de la identidad de los pueblos con particular respeto y fomento a las culturas originarias.
ALBA-TCP avanza hacia nuevos desafíos y uno de ellos es la creación, junto a PETROCARIBE de una Zona Económica, con el objetivo estratégico de ampliar y consolidar el espacio económico y comercial latinoamericano y caribeño, que genere oportunidades reales de crecimiento basado en la complementariedad. El ALBA seguirá aceptando los desafíos y retos de cada país desde una visión progresista.
Entre tanto, Blandino Nerio, miembro de la Comisión Política del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), destacó que para El Salvador ALBA no es solo un tratado comercial de los pueblos, sino es una transformación social, solidaridad, unidad y complementariedad entre las naciones.
“Los salvadoreños empezamos a conocer ALBA desde los ángulos sociales, antes que entrara la primera cisterna con combustible al país, ya habían viajado decenas de jóvenes salvadoreños a la escuela latinoamericana de medicina, a la universidad experimental de la Fuerza Armada de Venezuela y otros programas más”, comentó Nerio.
El representante de la comisión política del FMLN recordó que el 23 de diciembre de 2007 entró al país la primera cisterna con diesel, a partir de ese momento en El Salvador la empresa Alba Petroleos empezó a modificarse en la corrección de algunos abusos a los que se había estado sometido.
