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Mirna Jiménez
Diario Co Latino
El sueño del sacerdote Rutilio Grande de que los jóvenes de escasos recursos tengan acceso a la educación superior ha sido retomada por el programa: “Una Mesa Común para Todos y Todas”, find que ya recopiló miles de firmas Que respaldan la creación de una universidad que funcionaría en el norte De San Salvador, y llevaría su nombre.
“Uno de los objetivos es diseminar el legado de Rutilio Grande y descentralizar la Universidad de El Salvador (UES)”, comenta Mónica Fernández, misionera laica, quien forma parte del movimiento que promueve la creación de este centro de estudios superior.
En El Salvador egresan del bachillerato aproximadamente 50 mil alumnos al año, de los cuales solamente unos 6,000 logra ingresar y la Universidad de El Salvador. En términos absolutos, de 1 millón 200 mil jóvenes que han sacado el bachillerato, solamente unos 50 mil tiene tienen acceso a la educación superior que brinda el Estado, según los promotores de la nueva institución.
Con la nueva universidad se pretende dar cobertura a unos 10 mil estudiantes de la zona rural y urbana, que no tienen acceso a la educación superior pública y menos en el sector privado, según explicaron.
“La idea es que sea una universidad como le hubiera gustado a Rutilio Grande, sin fines de lucro, por lo que él incluso dio la vida, por lo que proclamaba su evangelio. A esos jóvenes son a los que queremos ayudar con este proyecto”, manifestó Sabas Clavel Fuentes, integrante del programa.
De acuerdo con el proyecto educativo, la Universidad Rutilio Grande tendría seis facultades y 42 carreras que entre otras incluyen: Ingeniería agronómica, ingeniería en sistemas, y en mecánica. En la parte humanística se incluye derecho. Habrían al menos 8 materias comunes con temas como pueblo originarios, identidad de nuestros mártires.
Fernández dijo que han tocado muchas puertas en busca del financiamiento del centro de estudios y que los titulares de la cartera de Educación han estado acompañando el proceso. Han solicitado también el apoyo del Ministerio de Justicia y Seguridad en el entendido que invertir en educación es ahorrar en seguridad.
Se ha visitado además las embajadas de Corea y de Japón, y se programa la visita a la embajada de Taiwán. Se ha buscado además a salvadoreños en el exterior, ya que el 27 de abril se presentó el anteproyecto de ley de creación de la universidad Rutilio Grande y se espera que los diputados de la entrante Asamblea Legislativa lo aprueben.
El anteproyecto de ley fue presentada con el respaldo de las alcaldías de El Paisnal, Aguilares, San Pablo Tacachico y Suchitoto, además de la Unión de Comunidades Rurales del Norte de San Salvador y la Libertad (UCRES) y la Fundación para la Cooperación y el Desarrollo Comunal de El Salvador (CORDES).
“Queremos hacer un llamado a toda la población salvadoreña a dar sus firmas”, subrayó Mónica Fernández, y agregó que los libros para dar las rúbricas estarán disponibles durante la celebración de la misa de cada domingo en la cripta de Catedral Metropolitana.
“Está claro que la prioridad va a ser los de escasos recursos. Luego de un año de estudio, va depender del rendimiento que está teniendo el alumno”, explicó. Alma de Navarrete dijo que esperan que les donen el terreno. Además hay necesidad de financiamiento para la construcción del edificio, aseguraron que en la zona Norte del país solamente funcionan dos universidades y hay una clara necesidad de contar con una que sea pública.
“Que los hijos de nuestros campesinos vayan adquiriendo la cultura necesaria, no para divorciarse de su medio y de sus comunidades sino para ir asumiendo un papel decisivo y transformador…”, dijo en su oportunidad el sacerdote Rutilio Grande, asesinado en marzo de 1977 y quien inspiró la conversión de monseñor Óscar Arnulfo Romero, que será beatficado el próximo sábado.
