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Deborah López
@DiarioCoLatino
En El Salvador, aún con las intervenciones realizadas en los últimos años, persisten los problemas nutricionales como la alta prevalencia de la desnutrición crónica, anemia y otras deficiencias de micro nutrientes en la niñez, así como también una alta prevalencia de obesidad y sobrepeso, lo que ocasiona graves problemas de salud y nutrición en el país.
Es por ello que el Centro para la Defensa del Consumidor (CDC) en
compañía de la Alianza para el Derecho Humano a la Alimentación en Centroamérica (ADHAC), la Organización de las Naciones Unidad par la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Unión Europea y otras organizaciones han realizado el “Estudio de legislación comparada
para la alimentación saludable en América Latina”. Según Fausto Cortéz, miembro de la ADHAC, “la obesidad y las enfermedades crónicas relacionados con la desnutrición son un problema emergente en El Salvador, y se manifiestan con una situación que merece una mayor atención”.
Entre 1998 y el año 2008, el sobrepeso de las niñas y los niños se incrementó en más del 40 % a nivel nacional. La explicación de esta situación es que existen varios sectores pobres que son quienes sufren las consecuencias de la mal nutrición. Asimismo, se tiene un fenómeno eminente de transculturalización por la adopción de hábitos alimentarios ajenos a las tradiciones propias representados por la alta ingesta de la comida chatarra como bebidas gaseosas, golosinas, frituras y demás comida rápida. De acuerdo con Cortéz, la industria de la alimentación favorece ese confrontamiento al comercializar productos masivos de alta calidad y de mayor contenido de grasa y azúcar que son dirigidos con mejor poder adquisitivo. “Por lo tanto se vuelve urgentemente necesario desarrollar leyes, políticas y planes nacionales con un enfoque nacional que incluya participación multisectorial y multidisciplinaria de la sociedad civil y de muchos sectores del país”, aseguró.
El objetivo fundamental del estudio es socializar con todas y todas para conocer los esfuerzos que se están realizando en materia de marcos normativos en los países latinoamericanos y que a partir de estas experiencias se pueda contar con elementos que permitan al país y a otros países tener un panorama más amplio que dé luces para la elaboración de propuestas normativas y se pueda enfrentar de mejor manera esta realidad. “Como aporte principal de esta investigación se ha considerado delimitar el análisis en los marcos normativos que expresen y promuevan una propuesta técnica de etiquetado nutricional de alimentación”, expuso Cortéz. En cuanto al etiquetado nutricional de alimento, “la empresa privada no se debe poner a la defensiva sobre este tipo de avance en materia de normativa, porque no se está pidiendo que se eliminen los productos, lo que se está pidiendo es que bajen precisamente la dosis que están presentando en las aguas carbonatadas y en el tema de los productos denominados comúnmente como comida chatarra”, señaló Danilo Pérez, director ejecutivo del CDC. La Defensoría del Consumidor así como el CDC y otras organizaciones sociales vienen implementando desde hace dos años una Campaña en Consumo Sostenible teniendo como base el hecho de que se ha constatado mediante investigaciones con el Ministerio de Salud (MINSAL) que el consumo excesivo de azúcar, sodio y grasas está contribuyendo a la enorme proliferación de problemas crónicos no transmisibles.
“Por eso a la DC le parece sumamente importante que organizaciones estén implementando estos estudios, estas investigaciones y análisis que proporcionan propuestas que podemos ir adoptando en el país en el tema de etiquetado”, expresó Yanci Urbina, presidenta de la Defensoría del Consumidor. El gobierno de la república ha implementado toda una serie de apoyos para la formulación de reglamentos técnico centroamericanos que ya están homologados en el tema de etiquetado general como nutricional.
“Toda norma es perfectible y estas propuestas dan elementos adicionales para mejorar esa normativa”, dijo Urbina.
