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Redacción Nacionales
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“El proyecto de agua tiene un 80% de avance, no lo boicotee”, pidió Candelaria Álvarez, en el contexto de una protesta de las comunidades de Pajales, Divisadero y Panchimalquito, ante las acciones del alcalde de Panchimalco, Jorge Mejía, del partido oficial Nuevas Ideas.
“Quiero preguntarle desde el día que estuvimos reunidos ¿Ya se puso los caites?, así como, dijo que el alcalde anterior se ponía los caites y nos humilló -diciéndonos- que éramos caitudos como el alcalde que teníamos, pero él se los ponía porque iba a las comunidades”.
“¿Y cuál es el miedo, a las comunidades?, si usted ha entrado para trabajar por el pueblo, no ha entrado a trabajar por su partido político. Porque aquí les guste o no le guste, vamos a estar en esta alcaldía”, alegó Álvarez.
El municipio de Panchimalco, que en nahualt significa “Lugar de Escudos y Banderas”, se encuentra a 17 kilómetros de distancia de la ciudad Capital, por sus características de herencia indígena y Colonial, es considerada una joya arquitectónica, que resguarda importante parte de la historia de país. Con una población de más de 40 mil personas y tierras con vocación agrícola, es considerada un destino turístico dentro del Área Metropolitana de San Salvador.
Y es, en este municipio que las comunidades han denunciado que desde la gestión del actual alcalde Jorge Mejía se ha violentado el derecho humano al agua de las familias de los cantones Pajales, Panchimalquito y Divisadero.
Los comunitario calificaron de “grave” la negativa del edil a dar continuidad a proyectos anteriores que acercarían la infraestructura para llevar el servicio de agua a más de 700 familias. Así como, otras acciones contra el tejido organizativo de las comunidades.
“Ahora venimos unos pocos, porque respetamos la palabra del presidente (Nayib Bukele) que no quiere aglomeración de tantas personas, pero usted (alcalde Mejía) le avisamos vamos a pasar días y noches ante la alcaldía. Estos son principios de nuestras comunidades y nuestras comunidades ya se les fue el miedo”, dijo a la líder comunitaria.
“Nosotros solo venimos a pedir nuestro derecho al agua y el derecho a tener una calle buena, -como usted dijo- que no se lleva con los campesinos, pues le aclaro que los campesinos le pagamos su sueldo, los campesinos pagan el sueldo de sus concejales. Y si no fuera por los campesinos, no imagino cómo podría estar usted en la alcaldía”, manifestó Álvarez.
En el año 2014 se inició un proyecto entre la Alcaldía Municipal de Panchimalco y las comunidades, que fue administrado de forma compartida entre autoridades locales y la Junta Administradora de Agua Potable de Cantarera, integrada por los tres cantones hasta mayo de 2021.
El sistema de agua dispone de un tanque de distribución que se encuentra en propiedad municipal en el cantón Divisadero, con una línea de distribución por tubería de 2 pulgadas; una línea que impulsa el agua y 45 cantareras distribuidas entre los tres cantones que ha permitido abastecer limitadamente a 608 familias (82.38%), de las 738 familias residentes de ese territorio.
Estas familias se abastecen con 2 barriles de agua, cada ocho días, para cada familia, para cubrir las actividades domésticas incluido el consumo, aseo y saneamiento, que en el contexto de la Emergencia por la pandemia del Covid-19 es insuficiente para atender las necesidades de los grupos familiares en la zona rural.
A lo anterior se suma la desigualdad de género, porque son las mujeres las que históricamente han sido delegadas para el abastecimiento del agua con el acarreo desde las cantareras a sus hogares, lo que genera sobrecarga de trabajo e invisibiliza su labor comunitaria y reproductiva.
Las comunidades organizadas de Pajales, Divisadero y Panchimalquito gestionaron el apoyo de la Asociación Comunitaria Unida por el Agua y la Agricultura (ACUA), para trabajar en conjunto e implementar un proyecto intercantonal para mejorar el abastecimiento de agua y beneficiar a las 738 familias asociadas, aprobado con el financiamiento de la cooperación internacional, para ejecutar desde febrero 2021.
No obstante, los espacios de diálogo entre comunidades y municipalidad se han bloqueado, al excluir el trabajo de los directivos de la Junta Intercantonal que administra el sistema de cantareras. Y negando el permiso para acceder a las instalaciones del pozo para continuar con el desarrollo del proyecto. Por tanto, las comunidades organizadas exigen al alcalde Jorge Mejía, y Concejo Municipal, garantizar el derecho humano del agua de la población de los tres cantones.
“Deben escuchar a las familias de las comunidades de Pajales , Divisadero y Panchimalquito, queremos una mesa de diálogo y llegar a acuerdos que den garantía de nuestros derechos”, pidió Álvarez.
Asimismo, exigieron el respeto al “derecho de organización de las comunidades”, como lo establece la Constitución de la República, y también, en su lucha por la reivindicación del Derecho Humano al Agua, que inicia con el reconocimiento de la Junta de Agua Intercantonal de Panchimalco.
