Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
El presidente del Centro de Tecnología Apropiada de El Salvador (CESTA), Ricardo Navarro, instó a las autoridades del Gobierno a que reflexionen sobre la decisión de construir el CIFCO en una parte de la Finca El Espino, ya que eso conlleva en un aproximado de 9 manzanas de tala de árboles.
“Yo quisiera recomendar a la Asamblea Legislativa y al Ejecutivo que reflexionen sobre esa decisión de querer instalar en El Espino el CIFCO. Van a ser más de nueve manzanas que se van a talar de árboles”, señaló Navarro.
A juicio de Navarro, con ello, se contribuirá a los problemas globales, como el cambio climático, erosión de la biodiversidad y la falta de agua local, los cuales serán difíciles de revertir.
La porción de terreno sería de una extensión superficial de 55,711.13 m², la cual forma parte de un terreno propiedad del Ministerio de Hacienda, de 475,806.7160 m², ubicada en la Finca El Espino, en Antiguo Cuscatlán, La Libertad Este. Dicho proyecto será ejecutado por la República Popular China.
A juicio de Navarro, lo más importante y grave es que se incrementará la vulnerabilidad del territorio. “Yo creo que se debería reflexionar en que no debemos incrementar la vulnerabilidad del territorio. Cuando vengan estos comportamientos extremos del clima, eso va a poner en serios aprietos al gobierno y a la población”.
El Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO) se construirá sin que las autoridades dieran explicaciones públicamente si existen estudios de impacto ambiental o si es viable construir en la zona, tomando en cuenta los múltiples daños que podrían causar.
El gobierno y la Asamblea Legislativa aprobaron segregar una parte de terreno para la construcción del nuevo CIFCO sin siquiera escuchar opiniones de técnicos o expertos medioambientales.
“La recomendación sería quizá mejor construir el CIFCO en los terrenos que ahora habían decidido para el nuevo estadio (en la ex Escuela Militar), porque no necesitamos otro estadio. De esa forma tendríamos un CIFCO, que creo yo que es importante, pero además no estaríamos incrementando la vulnerabilidad del territorio”, concluyó el ambientalista, Ricardo Navarro.