A 53 años de ANCIESAL
Redacción Nacionales
@DiarioCoLatino
En El Salvador, la ceguera es una discapacidad que obliga a las personas que la padecen a buscar opciones para movilizarse, trabajar y mantener una rutina diaria.
Lamentablemente, en el país no hay una cifra actualizada de personas que está ciegas, la última estadísticas que se conoce es de 2019, cuando la cifra oscilaba los 50 mil afectados.
En estos días, la Asociación Nacional de Ciegos Salvadoreños (ANCIESAL) cumple 53 años de fundación, en estos años su objetivo ha sido apoyar a las personas ciegas en El Salvador y ofrecer proyectos de empleo para su subsistencia o para que aprendan un oficio.
El presidente de ANCIESAL, Noé Morales, señala que más de 50 socios conforman la asociación, quienes apoyan a los miembros con diversos proyectos y beneficios que se logran con la ayuda de fuentes externas y gracias a los mismos aportes de la comunidad.
Fidel López, quien es integrante de ANCIESAL, dijo que a lo largo de los 53 años han trabajado por la reivindicación de los derechos de las personas con discapacidad en el país.
Y añadió que el Estado salvadoreño aún no ha honrado su deuda de poner en marcha la actual Ley Especial de Inclusión de las Personas con Discapacidad.
Según la Ley Especial de Inclusión de las Personas con Discapacidad en El Salvador, se busca asegurar la igualdad de oportunidades para personas con discapacidad, incluyendo la visual.
Y también que se eliminen las barreras y promuevan su inclusión plena en todos los ámbitos de la sociedad.
Esta ley establece derechos y obligaciones para el Estado y la sociedad en general, con el objetivo de garantizar que las personas con discapacidad visual puedan ejercer sus derechos en igualdad de condiciones.
Para López, las principales dificultades que enfrentan las personas ciegas son la falta de empleo y la indiferencia social ante los obstáculos que se encuentran en las calles, ya que no hay infraestructura adecuada para las personas ciegas.
Entre los servicios que ANCIESAL ofrece está el de masaje japonés, un servicio especializado en el área de masoterapia: masajes relajantes, reductivos, técnicas quiroprácticas y baños de vapor.
Se estima que, en El Salvador, las 50 mil personas registradas tienen alguna dificultad visual; sin embargo, para este sector no hay censos que actualicen su situación.
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