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@LauraCoLatino
Los cambios sociales deben ratificarse en las próximas elecciones presidenciales del 9 de marzo, order dijo ayer el sacerdote de la parroquia de Quezaltepeque, Carlos Vásquez, durante la misa dominical en la cripta de Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
En un llamado a la feligresía asistente a Catedral Metropolitana, Vásquez manifestó su deseo de que florezcan los pensamientos y los objetivos de todo el país.
“Esperamos que las próximas elecciones se desarrollen de la mejor manera y que se ratifique los logros que hasta ahora se tienen en proyectos sociales, como la entrega de uniformes y el vaso de leche”, apuntó.
El religioso señaló que “el pueblo tiene que salir en los próximos días a ratificar el crecimiento y defender sus derechos”.
“Que salgan a votar, que reconozcan cómo el pueblo ha empezado a hacer la historia que merecía desde hace tiempo a través de su reivindicación, buscando superar sus atropellos históricos, la violación y muerte a la que fueron sometidos”, enfatizó Vásquez.
Asimismo, recordó el mensaje del Papa Francisco, quien la semana pasada habría apuntado que la única manera para asegurar proyectos asistenciales es “cambiando las estructuras que no le dan vida al pueblo”.
“En este tiempo de campaña es lógico que quienes con capaces del mal lo sacan al máximo, no estamos en un país en que se debe perseguir o buscar venganza, no importa si es periodo electoral, las autoridades deberían investigar”, finalizó el sacerdote, respecto a las últimas acciones contra directores de algunos medios de comunicación nacional.
Vásquez dijo que le parece lamentable que la vida humana se ponga en riesgo por el simple hecho de resultados electorales. “La vida no está en oferta de riesgo y se respeta en cualquier momento”, afirmó.
En este sentido, pidió a la Fiscalía General de la República aplicar la ley como fuese conveniente. ”La ley es para dar vida pero al tergiversarla se convierte en un yugo que reprime, a una ley que no da vida, que no esperanzas, que no está hecha para la gente, sino para `proteger privilegios”, señaló. En tanto, dijo que con la continuidad de la oficina de tutela Legal del Arzobispado, la iglesia continúa con su labor para la defensa de los derechos humanos en el país.
“Estamos aquí para rechazar y combatir la miseria que permite la injusticia, nuestra feligresía aborrece la maldad, la mentira, el fraude, la blasfemia y las ofensas. Los cambios deben ratificarse”, finalizó el religioso.
