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SAN JOSÉ/Xinhua
El gobierno de Costa Rica firmó un contrato para un crédito por 300 millones de dólares con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) que será la base para crear un Fondo Nacional de Avales y Garantías, con el cual pretende impulsar la reactivación económica y atender las secuelas de la pandemia del COVID-19.
Según informó el Ministerio de Hacienda, una vez aprobado por la Asamblea Legislativa, este financiamiento estará disponible para que las empresas y personas con actividades productivas que se vieron afectadas por las medidas sanitarias para contrarrestar la pandemia.
El crédito proviene del Programa de Operaciones de Políticas de Desarrollo del BCIE y consta de 250 millones de dólares, a los que se suman 50 millones más que salen del Programa Regional de Apoyo y Preparación ante la COVID-19 y Reactivación Económica del mismo banco.
El gobierno costarricense manejará este fondo mediante un fideicomiso con la participación del Ministerio de Hacienda y el Instituto Nacional de Seguros, para luego otorgar los fondos a entidades financieras en condiciones especiales de tasas y plazos.
«Esta operación es la primera en su tipo que Costa Rica, como socio fundador del BCIE, recibe por parte de la entidad y llega como un apoyo en momentos en que la economía está viviendo los estragos ocasionados por la pandemia», detalló el presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi.
Por su parte, el ministro de Hacienda de Costa Rica, Elian Villegas, comentó que el proyecto del Fondo de Avales ayudará a que el sector privado tenga crédito a su alcance y pueda continuar con sus negocios, así como con la generación de empleo.
El gobierno de Costa Rica espera alcanzar a 18.000 empresas con este fondo, en momentos en que se estima una caída de un 5 por ciento en la actividad económica y un desempleo que ronda el 24 por ciento.
