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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
En un comunicado oficial la Embajada de los Estados Unidos anunció que el embajador Ronald Johnson finalizará su período de gestión diplomática en EL Salvador el 20 de enero del presente año.
“Con el cambio de gobierno en Estados Unidos, a partir de esa fecha, todos los embajadores que fueron designados políticamente deberán finalizar su gestión”, cita el comunicado.
El embajador Ronald Johnson fue confirmado por el Senado de los Estados Unidos el 27 de junio de 2019, y llegó al país junto a su esposa Alina Johnson, el 5 de septiembre de 2019.
Originario de Hartselle, Alabama, el embajador Johnson es un oficial retirado que sirvió a su país por tres décadas, luego, formó parte de la inteligencia, como enlace de Ciencia y Tecnología de Operaciones Especiales, antes de su designación como embajador de Estados Unidos para El Salvador, por el presidente saliente Donald Trump.
“El embajador Johnson tiene un amplio espectro de experiencia con más de cuatro décadas de servicio y liderazgo en el gobierno de los Estados Unidos y con un compromiso sustantivo en una amplia gama de temas regionales, incluyendo refugiados, antinarcóticos, antiterrorismo, derechos humanos y control de enfermedades de virus tropicales”, detalla el comunicado.
Matt Boland -consejero para Asuntos Públicos de la Embajada de los Estados Unidos- reiteró que los “embajadores son nombrados por el presidente y deben ser confirmados por el Senado de los Estados Unidos. Y después de una elección, si el presidente no es reelegido, se acostumbra que todos los embajadores de los Estados Unidos presenten una carta de renuncia al presidente”.
Y como es tradición y el Memorando de la Casa Blanca para los nombramientos presidenciales, el embajador Johnson y su esposa saldrán de la Embajada de los Estados Unidos en El Salvador el 20 de enero de 2021, explico Boland.
“Estados Unidos quiere ayudar a mejorar la seguridad, crear crecimiento económico y promover el buen gobierno en El Salvador. Esos objetivos no han cambiado sustancialmente durante una década y lo importante es que si El Salvador es seguro y próspero es bueno para los Estados Unidos también. Hemos tenido estas metas principales bajo presidentes republicanos y presidentes demócratas y creo que los Estados Unidos y El Salvador se mantendrán enfocados en estas metas compartidas”, puntualizó.
