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Gloria Silvia Orellana
@ DiarioCoLatino
“Deben escuchar la voz de las víctimas e introducir este tema al debate de la Ley de Reconciliación, porque han pasado casi 30 años del fin del conflicto armado y esta temática aún sigue invisibilizada”, manifestó Paula Cuéllar, en la presentación de su estudio: Las Mujeres Alzan su Voz, Relatos Femeninas de una Revolución.
“En el tema de violaciones sexuales durante el conflicto se conoce poco. Y no existe mayor sorpresa que las fuerzas de seguridad del Estado y la Fuerza Armada, perpetraran violaciones sexuales a las mujeres y niñas de forma generalizada y sistemática”, añadió Cuéllar.
“En el caso de las fuerzas guerrilleras los estudios académicos, a la fecha, han romantizado la idea de las relaciones sexuales dentro de la guerrilla, y creo que debemos derribar justo uno de esos mitos, porque estas fueron para control y subordinación de la mujer”, manifestó Cuéllar.
En vísperas del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, que se conmemora cada 25 de noviembre, Human Rights Program, University of Minnesota, FESPAD, Radio YSUCA, el Programa de Doctorado de Educación con especialidad en Cultura de Paz Y Derechos Humanos de la Universidad de El Salvador (UES), realizaron este encuentro de reflexión.
Sobre la presentación del estudio doctoral de Paula Cuéllar, el director de FESPAD, Saúl Baños, afirmó que era importante que se conozca la verdad, como una fuente de apoyo a las víctimas a las que históricamente se les ha negado la oportunidad de acceder a la justicia de manera sistemática.
“Conocer esta investigación a profundidad, de Paula Cuéllar Cuéllar, debemos mencionar, una joven salvadoreña con una formación sobre derechos humanos, y cuyo aporte a la sociedad salvadoreña tiene ese primer elemento que es el recambio intergeneracional del país, es una especie de entrega de estafeta”, dijo Baños.
“Todos sabemos que la verdad se ha negado en el país de manera sistemática, institucionalizada por el Estado y las víctimas y familiares de las víctimas están muriendo -esa variable que es del tiempo- pero los victimarios que también están muriendo, pero pasan a la impunidad, una realidad de los pueblos latinoamericanos”, sostuvo Baños.
El director de FESPAD afirmó que es un tema muy sensible y que se ha venido evadiendo su abordaje pleno y franco por ambos bandos que participaron del conflicto armado en la década de los años ochenta.
“Es un tema del que no se ha querido hablar. Y porque no nos guste el tema, no vamos a evadir un debate inicial porque la visita de ella será con otras entidades sociales y académicas para hablar sobre su investigación”, refirió Baños.
Al citar su investigación, Paula Cuéllar afirmó que la finalidad de su estudio era visibilizar un fenómeno que generalmente se encuentra en la oscuridad en el país. Actos de violencia sexual perpetrados durante el conflicto armado, que han sido “ silenciados”, desde el Informe de la Comisión de la Verdad
“En el informe de la Comisión de la Verdad, solo se hacen dos menciones al delito de violación sexual en el reporte, y en la parte de los hallazgos que no fueron publicados, se les relaciona como un asunto relativamente menor y esto revictimiza a las mujeres”, dijo Cuéllar.
“Aclaro, no voy a desmeritar el trabajo de la Comisión de la Verdad de El Salvador, porque su labor fue muy valiosa, ya que investigó tres crímenes como las Ejecuciones Extrajudiciales, Desapariciones Forzadas y Torturas que terminaron en muerte”, consideró Cuéllar.
No obstante, manifestó que se debe valorar la exclusión de la violación sexual, de las páginas del Informe de la Comisión de la Verdad, a partir, que está referido al 50% de la población que experimentó esta violencia. Y que la finalidad de las “Comisiones de la Verdad”, es en general, para establecer la verdad sobre violaciones perpetradas en conflictos armados o dictaduras.
Sobre su estudio, Paula Cuéllar mencionó que ha acuñado el concepto de “perpetradores inimaginables”, al manifestar que en el Informe de la Verdad solo se le atribuye un 3% de violaciones a derechos humanos a la guerrilla, que podría generar una idea de “chicos buenos”, frente al Estado que acumuló un 95% de estas violaciones.
“En el caso de violencia sexual, al haber sido ambas partes perpetradoras de ese delito, ninguna de las dos quiso llamar la atención sobre ese delito, a los miembros de la Comisión de la Verdad. Porque ambas partes referían casos que podían considerar paradigmáticos, pero no fueron mencionados”, dijo Cuéllar.
“En el caso de las víctimas podemos decir que fueron mujeres y niñas de la población civil, de los perpetradores del Estado y en el caso de la guerrilla, las víctimas que he encontrado fueron mujeres y niñas, que formaban parte de sus propias filas”, indicó.
Para la abogada, la Comisión de la Verdad no asumió a profundidad las violaciones sexuales, no obstante, que ese crimen se encontraba como parte de su mandato y que los casos presentados relacionados al tema solo se encuentran en el Tomo II de Anexos de dicho informe que nunca fueron publicados.
“Definitivamente, el fenómeno de la violencia sexual y particularmente el crimen de violación, no es nada nuevo. Históricamente las mujeres han sido víctimas y en el caso particular de El Salvador, antes de la guerra ya se cometían este tipo de abusos pero en la guerra exacerbó esta práctica”.
“En mis conclusiones, aunque fuera por diferentes razones, ambas fuerzas beligerantes tenían la finalidad de controlar y subordinar a la mujer, claro, las fuerzas de armadas por aterrorizar a la población, y también era una forma de ambas partes de recordarle a la mujer su rol en la sociedad”, puntualizó Cuéllar.
