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Por Alessia Genovés
Colaboradora
El Centro Comunitario “Francela Méndez” nace como “un espacio seguro y de resguardo para la población LGBTIQ”. La institución ha sido inaugurada éste fin de semana, en honor a la activista y defensora de derechos humanos, Francela Méndez, mujer transexual que fue asesinada el 31 de mayo de 2015. La iniciativa es capitulada por la Asociación Colectivo Alejandría, en respuesta de “la continua violación a los derechos humanos de las personas trans”.
“Hay muchas personas LGBT que fueron asesinadas, y ella (Francela) es parte del legado que se vino a hacer. No se puede hacer a un lado todos los crímenes que cometieron con otras compañeras trans”, dijo la representante del Colectivo Alejandría, Karla Guevara. Tras la apertura del nuevo espacio, “viene a dignificarse un poco los crímenes que, si bien es cierto se ejercían en años anteriores y en mayor cantidad”. Sin embargo, el asesinato de Francela sigue impune, pues las autoridades no han sometido a los culpables, aunque la justicia ya ha favorecido al menos 6 casos de asesinatos de mujeres trans y personas LGBT en los últimos tres años.
Servicios a personas LGBT
Casa “Franscela Méndez” ofrece servicios especializados a personas LGBT. Se establece como un espacio seguro para el grupo de personas vulnerables, que amplía los servicios de atención jurídica y sanitaria a los que se dedica el Colectivo Alejandría. En opinión del miembro de la organización Entre Amigos El Salvador, Josué Velázquez, “la riqueza radica en que las personas LGBTIQ+, y las personas en general, tengan un espacio seguro dónde acudir, poder tener un espacio de orientación de sus derechos humanos, recibir algún tipo de asistencia psicológica también, que es clave”.
La institución dispone de una Oficina de Atención a Víctimas, “que va a dar asesoría legal gratuita, y también atención psicológica gratuita”, indica Guevara. Añade que la institución será el escenario para el desarrollo de jornadas de salud que incluyan la toma de la prueba de VIH: “Vamos a regalar también insumos de protección para el VIH, y condones lubricantes. Pero, también, otro tipo de salud, como médicos generales, a través de un médico general que pueda chequear a las mujeres trans”.
Responde a los crímenes de odio
“El Salvador es un país altamente violento, homofóbico y machista; y, en especial, hay mucho odio hacia mujeres trans. El caso de Francela no es aislado. Hay muchísimas víctimas de mujeres trans que han sido violentadas, muchas veces incluso por cuerpos uniformados, por población civil y pandillas. Y muchos de ellos, quedan en la impunidad, que es el caso de Francela”, lamentó la defensora de derechos humanos, Alejandra Flores.
La prensa ha documentado más de 500 asesinatos de personas trans desde la década de 1990, según lo señala la Asociación Solidaria para Impulsar el Desarrollo Humano.
La Federación Salvadoreña LGBT enumera 69 homicidios de personas LGBT desde el 2017 hasta el 2023. Para 2022, la organización Comunicando y Capacitando a Mujeres Trans identificó tan sólo un asesinato de “una persona trans sin identidad de género”, mientras que en el año en curso, no se han identificado homicidios ni muertes en cárceles.
No obstante, la PNC ha enumerado la desaparición de “32 hombres transgénero y 20 mujeres transgénero” desde marzo de 2022, según lo informa Alejandría. Guevara añade que “lamentablemente, tenemos ahora personas LGBTI que siguen siendo perseguidas y que han sido encarceladas injustamente”; y, de hecho, la organización AMATE El Salvador identifica que, hasta junio de 2023, un total de 37 personas LGBT fueron detenidas durante el Régimen de Excepción, la mayoría inocentes, y una minoría integrante de estructuras terroristas.
