La CNN confirmó el hecho con un vocero de dicha entidad judicial, quien aclaró que hasta ahora no se le orientó a los empleados evacuar el local.
La ceremonia inaugural del ascenso de Biden a la presidencia tiene lugar en las inmediaciones del Capitolio, bajo estrictas medidas de seguridad, que incluyen el despliegue de más de 25 mil efectivos de la Guardia Nacional y miles de agentes del Buró Federal de Investigaciones, el Servicio Secreto y la policía.
Decenas de millones de telespectadores en Estados Unidos y todo el mundo disfrutarán el espectáculo, que estaba cerca de comenzar cuando se reportó la amenaza de explosión en la Corte Suprema.
En el acto participan alrededor de mil personalidades, mucho menos de las 200 mil que habitualmente asisten a estas actividades de toma de posesión, como medida preventiva ante la pandemia de la Covid-19 y ante la cadena de amenazas sobre posibles ataques terroristas durante el evento.