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“Los luchadores, activistas que de forma pacífica defienden a sus comunidades del desalojo, los que luchan por el derecho al agua, son perseguidos, criminalizados y detenidos bajo cargos inexistentes”
Alma Vilches
@AlmaCoLatino
El Movimiento de Víctimas del Régimen (MOVIR), junto a familiares de capturados arbitrariamente y organizaciones defensoras de derechos humanos, pidió al arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, tomar un papel más coherente con las víctimas.
A tres años de la promulgación del Régimen de Excepción, han sido capturadas personas sin ningún vínculo pandilleril y cerca de 426 han muerto sin ser vencidos en juicio, los salvadoreños se encuentran ante una defensa pública totalmente desbalanceada, donde saldrá el que logré sobrevivir no el inocente.
La abogada Roxana Cardona dijo que, a través de una nota solicitan al jerarca católico interceda por los presos de conciencia, políticos y detenidos inocentes bajo el Régimen de Excepción que ya lleva tres años de vigencia
“Nos encontramos ante un régimen de excepción el cual ha profundizado más las injusticias, tanto sociales como judiciales, dicho régimen en términos generales no ha abordado de manera directa y contundente las causas del problema de la delincuencia”, aseguró.
Cardona expresó que el papel de la iglesia ha sido mostrar a Dios como un ser de justicia y misericordia, atento al clamor de los necesitados, sin embargo, rara vez se ve a esos necesitados dentro de la falta de paz, justicia y seguridad física, entre muchas otras cosas.
“La falta de justicia, de equilibrio y de búsqueda del bien común que nos ha traído acá, el rol de la iglesia ante las injusticias es comprender el mundo y su realidad, interpretándolo como una iglesia profética que señala toda clase de injusticias, tal como lo hizo Jesús. Debemos ser sensibles, movidos por amor y por compasión a los que sufren injusticia.”, enfatizó.
Samuel Ramirez, dirigente del MOVIR, manifestó que acompañados de otras organizaciones defensoras de derechos humanos se concentraron en el atrio de Catedral Metropolitana de San Salvador, las víctimas del gobierno están desafiando la represión y persecución.
Recalcó que en este momento todo mundo tiene miedo a pronunciarse, manifestarse, y denunciar las malas acciones de este gobierno, sin embargo, MOVIR no puede estar tranquilo cuando hay muchas personas inocentes que están muriendo en la cárcel, a quienes no han podido comprobarles el delito por el cual fueron capturados.
“Queremos decirle al obispo que se pronuncie por este sector de población marginada, que ha sido abandonada por este gobierno, cuál es el miedo del obispo (Escobar Alas) a pronunciarse por la violación de los Derechos Humanos, cuál es el compromiso que hay entre el obispo y el Régimen de Excepción”, cuestionó Ramírez.
A la vez, destacó el pronunciamiento de los obispos, entre ellos, el cardenal Gregorio Rosa Chávez, quienes se han mostrado a favor de las víctimas inocentes y piden el fin del Régimen de Excepción, que se respeta el debido proceso, determinar la inocencia o no de las personas detenidas, y las que son pandilleras o criminales, les apliquen la ley, pero los inocentes deben salir libres de inmediato.
Indicó que MOVIR ha acompañado a los familiares de las víctimas a la Procuraduría Para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) donde simplemente reciben a la gente, pero no hay una atención como debe ser; en la Procuraduría General de la República (PGR) les cierran la puerta.
“Hemos ido a la Fiscalía para demandar a los funcionarios por actos arbitrarios, y no hacen nada, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) tampoco responde a las peticiones de las víctimas. El presidente Bukele tiene los documentos de 258 personas que hemos verificado con abogados que son inocentes, no hay ninguna justificación para mantener en detención provisional a quienes se le comprueba su inocencia”, señaló.
Los familiares de las víctimas expresaron que muchos de los detenidos desde hace algunos meses cuentan con carta de libertad, sin embargo, continúan en la cárcel, por ello, pidieron al presidente de la República, Nayib Bukele dejar libres a estas personas y castigar a quienes sí son pandilleros y criminales.
