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Carlos Giron S.
Arlington, Dallas, Texas. Decía en un comentario anterior, que los habitantes de este mundo y de nuestra época deberíamos sentirnos orgullosos y privilegiados de vivir en una civilización avanzada, pero ahora tengo que decir:
…¡Siii! ¡Increíble! ¡Asombroso! ¡Inexplicable!, pues aunque sea así, cada vez pareciera que hay mas y mas testimonios y evidencia de que nuestro planeta, la Tierra es hueca y que dentro ¡hay una civilización tan avanzada como la de aquí arriba y acaso un poco mas! Se menciona que hay allí objetos como los platillos voladores, y que de allí provienen los que a veces se reportan que han sido vistos en nuestro espacio. Algo mas y pasmoso: que sus habitantes son gigantes de tres y tres y medio metros de altura, animales igualmente grandes, como también las frutas de las que aquí conocemos y comemos.
Lo que sigue es igualmente sorprendente. En nuestros medios de comunicación no recuerdo haber leído noticias o informaciones o reportajes de TV sobre este tema, como tampoco en medios impresos extranjeros. ¿Se estará escondiendo este secreto, como también el de los OVNIS? Donde si hay abundantes comentarios y hasta reportajes es en YouTube, que se ha vuelto un medio valioso por todos los materiales que sirve, de toda índole, desde musicales, hasta literarios y cinematográficos. Muy valioso. Y lo mejor, de acceso gratuito para quien tenga computadora e internet. Por esto seguramente un gran publico en todas partes ya conoce estos “misterios”.
Los reportes que por otro lado he visto acerca de este fenómeno increíble indican que los polos Norte y Sur de nuestra Tierra no son otra cosa que entradas hacia ese submundo, el llamado Reino de Agharta, que ¡tiene su propio Sol!, un poco mas pequeño que el del sistema planetario en nuestra galaxia… Y hay mas: allí adentro hay túneles que conectan con otros túneles dentro de la Pirámide de Giza, Egipto; otros abajo del Matogroso, Brasil y varios otros. Como digo, todo esto parece ficción y fantasía. Pero ya aportare aquí, y luego mas adelante parte de escritos sobre este tema de personas que merecen mucho crédito, pues varios son los que han escrito con datos y fechas de eventos relativos a esa oquedad en nuestro planeta. Incluso se ofrecen fotografías como evidencia (¿reales o digitalizadas? no se sabría decir).
Interesante de mencionar es que en el estado de California, Estados Unidos, al norte, en lo que es la Sierra Nevada se encuentra el Monte Shasta, que también esta rodeado de enigmas y misterios. Se dice que allí debajo habitan sobrevivientes del hundimiento de la Atlántida. Pero lo mas singular: que tiene túneles que llevan al interior del planeta, a esa civilización muy avanzada de Agharta…
Tal vez la verosimilitud de estas narraciones bien pueda sustentarse en el hecho de que -como digo- varios autores de prestigio han escrito libros bien documentados sobre la existencia de un reino dentro de la Tierra. Uno de ellos es el Dr. Raymond Bernard, cuyo nombre debe serles bien conocido a muchos. El es un famoso medico francés que fue de los pioneros en practicar cirugías y trasplantes de corazones humanos. Es Rosacruz y, además, en relatos -que están poniéndose tan de moda- relacionados con este enigma de la Tierra Hueca, se mencionan “tradiciones Rosacruces”. Muy interesante esto. Bernard ha escrito el libro “La Tierra Hueca”. Veré si mas adelante ofrezco algunos párrafos del mismo.
Otro autor es el Dr. Joshua David Stone, quien ha escrito ¡Agharta en la Tierra Hueca! Veamos. Para empezar dice:
“El más grande encubrimiento de todos los tiempos, es el hecho de que existe una civilización de personas que viven en el centro de la Tierra, cuya civilización es conocida con el nombre de “Agharta”. Esto puede ser difícil de creer para algunos de ustedes. Yo se que eso fue así al principio para mí; sin embargo, yo tengo ahora un absoluto conocimiento interno de la verdad de esto.
“Para empezar, los Budistas en su teología creen fervientemente en su existencia. Ellos creen que es una raza de super-hombres y mujeres, que de vez en cuando salen a la superficie, para revisar el desarrollo de la raza humana.
Ellos también creen que ese mundo subterráneo tiene millones de habitantes y muchas ciudades; y su capital es Shamballa. Se creyó que el maestro de este mundo le había dado órdenes al Dali Lama, quien era su representante. Sus mensajes estaban transmitiéndose a través de ciertos túneles secretos, que conectan este mundo interior con el Tíbet”. Y continua el Dr. Stone:
“El famoso pintor y místico ruso Nicolás Roerich afirmó que Lhasa, la capital del Tíbet estaba conectada por un túnel con la Tierra Interna, Shamballa. La entrada de este túnel estaba custodiada por los Lamas, quienes fueron obligados a guardar el secreto. Se creía que un túnel similar era para conectar las cámaras secretas en la base de la gran pirámide de Giza y Agharta (este libro contiene un grabado donde se delinea un pasadizo en esa dirección).
“La épica de la India, el Ramayana y el Bhagavad Gita -sigue la cita del libro-, son los dos textos más famosos de la India. El Ramayana cuenta la historia del gran Avatar Rama; el Bhagavad Gita la historia de Krishna. El Ramayana describe a Rama como un “emisario de Agharta”, quien llegó en un vehículo aéreo. Esto es absolutamente extraordinario, que tanto el Budismo y las religiones Hindúes –por separado- se refieran a Agharta.
Continua luego este autor con lo que considera evidencia científica de este misterio, el relato que hace dice:
“Cuando (1947) el Almirante Richard E. Byrd -de la Marina de los Estados Unidos- (hay una confesión escrita de el), voló directamente hacia el Polo Norte y en vez de ir sobre el polo, realmente él entró en el interior de la Tierra. En su diario Byrd dice que ello fue entrar en el interior hueco de la Tierra y viajar 1.700 millas sobre montañas, lagos, ríos, vegetación y vida animal. Él apunta haber visto animales monstruosos semejantes al mamut de la antigüedad moviéndose a través de los matorrales. Agrega que finalmente encontró ciudades y una floreciente civilización.
El pasmoso relato del almirante Byrd esta contenido en un documento que en un primer momento hizo publico en un periódico, pero prontamente fue silenciado por el gobierno estadounidense como el mismo afirma.
Así pues, en otro trabajo posterior sobre este mismo apasionante tema tendré el agrado de ofrecer partes del libro de Raymond Bernard, como también del Dr. Stone, y como guinda sobre el pastel ¡el escrito del propio Richard Byrd! Paciencia, pues…
