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Alberto Romero de Urbiztondo
Twitter: @aromero0568
Los días 18 y 19 de septiembre se ha celebrado en San Salvador el “I Congreso Internacional e Intergeneracional de Educación Integral en Sexualidad”. Más de 650 personas se reunieron al sentirse convocadas por la urgente necesidad de garantizar que en El Salvador se imparta la Educación Integral en Sexualidad a toda la niñez y adolescencia. Llegaron de todos los departamentos del país, estudiantes, docentes, madres de familia, alcaldes y defensores de derechos humanos que intercambiaron sus experiencias y conocieron valiosa información de expertos provenientes de México, Uruguay y Argentina.
En nuestro país en 2017, 19,190 niñas y adolescentes quedaron embarazadas y obligadas a una maternidad temprana; de ellas 741 tenían entre 10 y 14 años. En 2016, la Fiscalía General de la República reportó 1,798 casos de violación de menores entre 11 y 17 años, en el mismo año el Ministerio de Educación informo de que 952 adolescentes habían abandonado sus estudios a causa de estar embarazadas. Esta realidad tiene uno de sus problemas en que nuestra niñez y adolescencia carecen de una Educación Integral en Sexualidad, que le permita gestionar su sexualidad, de una manera responsable segura y satisfactoria y que ser capaz de identificar cuando desde entornos cercanos entra en un proceso de abusos sexual.
Este problema ya se abordó durante el gobierno del presidente Francisco Flores, para lo que entre el Ministerio de Salud y el de Educación elaboraron el manual “De adolescente para adolescente”, que pretendía dar una educación sexual con base científica, enfoque de derechos y con un abordaje amigable para los adolescentes. Sin embargo, el obispo católico Saenz Lacalle junto a la organización Si a la Vida lanzaron una campaña de presión al Gobierno, hasta obligar a que se retiraran y destruyeran los manuales, violando el carácter laico del Estado.
Veinte años después, las personas participantes en el citado Congreso vuelven a reivindicar que el Estado cumpla su obligación de garantizar el derecho de la niñez y juventud a una Educación Integral en Sexualidad.
