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@arpassv
El gobernante FMLN realizó el pasado fin de semana su 33a. Convención Ordinaria, en la que hizo cambios a sus estatutos para ajustarlos a las disposiciones de la Ley de Partidos Políticos. En dicha actividad participaron el propio Presidente Salvador Sánchez Cerén, el vicepresidente Óscar Ortiz, secretarios presidenciales, ministros y otros altos funcionarios del Ejecutivo.
El encuentro fue denominado: “A defender las conquistas de pueblo, lo conquistado no se entrega”. Sin embargo, éste se caracterizó por una total ausencia de autocrítica y no hubo ningún llamado al gobierno de corregir errores para evitar -precisamente- “entregar lo conquistado”.
La reunión era propicia para hacer una evaluación crítica del desempeño del gobierno y sus logros reales, y exigir al Presidente Sánchez Cerén revisar sus estrategias políticas, la orientación de sus políticas económicas y hacer cambios significativos en su gabinete.
Esta tarea es urgente, porque así como va el gobierno, lo más seguro es que el FMLN va a “entregar las conquistas” en las elecciones del 2019 y ARENA volverá para hacer lo que están haciendo Mauricio Macri en Argentina y Michel Temer en Brasil, o algo todavía peor.
En lo político, el gobierno necesita plantearse una estrategia más audaz para salir del acoso permanente y del arrodillamiento al que lo somete la derecha oligárquica. Necesita redefinir su idea de consenso y gobernabilidad, y aliarse con el pueblo para presionar a ARENA en vez de suplicar.
En lo económico el Ejecutivo urge decidir un combate firme contra la evasión y elusión tributaria de las grandes empresas, y renunciar a la intensión de nuevos impuestos que golpearán a la población. Para esto necesita cambiar el ministro de Hacienda y evaluar seriamente a todo el gabinete económico.
Y, en relación al resto del gabinete, Sánchez debe pedir la renuncia a todos sus ministros, presidentes de autónomas y secretarios presidenciales, y destituir a los que no están funcionando. La gente espera cambios, pero lo que percibe hasta hoy es inercia, falta de liderazgo y ausencia de conducción política del Presidente.
La próxima semana, un grupo significativo de organizaciones revolucionarias, progresistas y democráticas exigirán públicamente cambios al Presidente. Ojalá Sánchez Cerén se anticipe y haga los cambios que permitan a su gobierno iniciar el año 2017 con nuevos bríos.
Si el gobierno no hace éstos y otros cambios urgentes, el FMLN tendrá que resignarse a “entregar lo conquistado”.
